| domingo, 07 de diciembre de 2003 | Embestida de Kirchner contra la inseguridad El presidente afirmó que se volcará "toda la fuerza del Estado" para terminar con la ola de asaltos y robos El presidente Néstor Kirchner se reunió ayer con vecinos del barrio porteño de Villa Urquiza, zona en que durante la última semana de desató una seguidilla de delitos, y les prometió poner "toda la fuerza del Estado" para combatir la inseguridad.
El secretario general de la Presidencia, Oscar Parrilli, explicó que Kirchner le había dicho a los vecinos que hará "todo lo posible para terminar con la inseguridad".
El jefe de Estado se trasladó por la mañana hasta la pizzería Black Jack, en la calle Pampa 5100 de la Capital Federal, donde anteayer un grupo de desconocidos forzó la persiana, rompió un vidrio y robó el dinero que había en la caja.
Anteanoche, los vecinos protagonizaron una marcha hacia la comisaría 39, donde mantuvieron un diálogo con el comisario inspector Lucio Tirao, jefe de la séptima circunscripción, para reclamarle más presencia de los efectivos en la calle y operativos para erradicar la serie de asaltos y robos violentos que han tenido como blanco principal restaurantes y pizzerías.
El diálogo del presidente con los vecinos -dijo Parrilli- se desarrolló en un marco de respeto y cordialidad.
Por la tarde, al llegar a la Municipalidad de General Pico, en La Pampa, Kirchner fue recibido por un grupo de 500 ciudadanos pampeanos, quienes, cacerolas en manos, también le reclamaron por la inseguridad.
El presidente se reunió con la gente y volvió a comprometerse en el desarrollo de una política que termine con la inseguridad que padecen los argentinos.
Pese a que la manifestación parecía, en un principio, hostil, Kirchner terminó siendo vivado por la gente.
El ministro del Interior, Aníbal Fernández, dijo que el gobierno considera que el problema de la inseguridad afecta a "todo el país". (DyN y Télam) enviar nota por e-mail | | |