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 domingo, 07 de diciembre de 2003

[Certamen] Periodistas por un día
Los perjuicios educativos que ocasiona vivir en el interior
Alumnos de una escuela de San José de la Esquina fueron premiados por un texto sobre los problemas para unir el estudio y la necesidad de trabajar

"Los problemas económicos que sufría mi familia me impidieron comenzar con los estudios universitarios, lo que me llevó a buscar trabajo antes de terminar la secundaria. Ya en los últimos meses de estar cursando sexto año, al igual que varios de mis amigos, teníamos ofertas laborales que se relacionaban con el título que en poco tiempo íbamos a obtener en la escuela", dice Germán, que hoy tiene 25 años y trabaja desde 1996, año en que terminó sus estudios secundarios. Es un ex alumno de la Escuela de Enseñanza Técnica Nº 476 de San José de la Esquina, graduado de técnico mecánico (antigua denominación que se le otorgaba a la actual modalidad de producción de bienes y servicios del polimodal).

"La verdad es que si bien en un comienzo me incentivaba la idea de tener mi propio sueldo, con el tiempo me arrepentí de la decisión de trabajar aunque en ese momento no me quedaba otra opción. Creo que mi oportunidad ya pasó, si hoy tuviera los medios para comenzar a estudiar no lo haría", agrega. Este es sólo un ejemplo de la realidad que sacude a nuestro pueblo, y que se compara con otras situaciones similares: la imposibilidad de continuar un estudio superior por problemas económicos. Si bien hay otras circunstancias que limitan estas posibilidades, este es el caso más frecuente.

En San José de la Esquina -una localidad ubicada a 100 km de Rosario y de 7.500 habitantes- existe una problemática concreta a nivel educativo terciario y superior, ya que solamente funciona un profesorado de historia y geografía y otro de analista de sistemas, por consiguiente, la oferta educativa es muy limitada.

No obstante, en localidades cercanas, se hallan establecimientos que ofrecen otras alternativas de estudio. Entre ellas, Cruz Alta, donde se pueden estudiar los profesorados de ciencias económicas, y de lengua y literatura, y el magisterio. A su vez, en Casilda funciona la extensión de la Universidad Nacional de Rosario (UNR) en veterinaria y ciencias económicas, además de los profesorados de matemática y física; lengua y literatura y maestra jardinera. En tanto que en Zavalla, la oferta pasa por la Facultad le Ciencias Agrarias, dependiente de la UNR.

Pero, sin duda la meta ambicionada por todo egresado es proseguir sus estudios en Rosario, que ofrece un amplio espectro educativo tanto en establecimientos privados como públicos, como es el caso de la Universidad Nacional de Rosario. Sin embargo, es cuando los jóvenes emigran que aparecen distintas problemáticas, que pueden resumirse en el desarraigo, problemas económicos o equivocación en la elección.

Estas problemáticas se vieron reflejadas en un relevamiento realizado sobre 723 egresados en la última década (1992-2002), de las dos instituciones de nivel medio de la localidad: la Escuela de Enseñanza Media Nº 226 Guardia de la Esquina y la Escuela de Educación Técnica Nº 476 Miguel Castellanos. Se constató que el desarraigo es un síntoma frecuente que se percibe en los chicos de este pueblo, que experimentan nostalgia y melancolía al separarse de sus seres queridos.

A su vez, dada la situación económica imperante en nuestro país desde hace varios años, muchas familias no pueden afrontar los innumerables gastos que origina que sus hijos estudien fuera de la localidad. Por otra parte, también es real que muchos estudiantes, al finalizar la secundaria, no tienen una orientación certera de la carrera que desean emprender. Es por eso que, aunque comienzan con un enorme entusiasmo, al poco tiempo abandonen o cambien el rumbo en su elección.

Este es el caso de Agustina, que cuenta: "Desde chiquita siempre soñaba con ser una famosa del espectáculo, pero más tarde comprendí que era casi un imposible, luego opté por buscar un futuro y me inscribí para estudiar ciencia política, sin saber bien de qué se trataba, porque mi padre se relacionaba con eso. Pero al poco tiempo me dí cuenta de que no era lo mío y abandoné todo".


Estudio y trabajo
Según el relevamiento mencionado, el 9% de los sanjosesinos de 18 a 28 años no estudia ni trabaja y la mayoría no se interesa en la política ni en la lectura. Pero no todo es tan oscuro. Esta apreciación refleja sólo un porcentaje limitado de los estudiantes, ya que un buen número de ellos se siente a gusto con su elección, su nuevo modo de vida y logra insertarse o acostumbrarse a su nuevo entorno, aunque su terruño los atrae, ya que la mayoría regresa a sus afectos los fines de semana.

Dentro de este grupo, un 8,8% de los entrevistados manifestó que debido a dificultades económicas, para poder costear sus estudios, trabaja. Mientras que otros, ante la necesidad de una salida laboral inmediata, se inclinan por continuar por cursos cortos, tales como: depilación, manicuría o cursos de pastelería.

Dentro del margen de los graduados, deducimos que, si bien un alto porcentaje logró insertarse en el campo laboral, sólo el 5,8% lo hace ejerciendo su especialidad. En parte, esto se debe a la necesidad de conseguir un trabajo que les dé sustento, postergando la pretensión de trabajar en su especialidad.

Cristian es un ingeniero agrónomo, de 25 años, que logró insertarse en su profesión. "Al principio -cuenta- fue muy duro, porque me costó adaptarme a la nueva vida, pero evidentemente mi vocación estaba bien orientada, es por eso que logré vencer las dificultades y obtener el título tan deseado. Actualmente estoy trabajando en mi especialidad en la localidad de Las Parejas".

Hoy por hoy, el conocimiento y la experiencia son los pilares fundamentales a la hora de conseguir un empleo bien remunerado. La encuesta realizada arroja como resultado que las carreras más requeridas por los sanjosesinos son ingeniería mecánica y contador público; como consecuencia de las modalidades que otorgan las dos escuelas medias. Actualmente, debido a la nueva modalidad comunicación, arte y diseño, comienzan a abrirse nuevas posibilidades que le permitirán al egresado optar por ofertas innovadoras, como es el caso de publicidad y marketing, diseño gráfico, comunicación social, entre otras.


Cruel realidad
Argentina es un país sumamente extenso, que posee a lo largo y a lo ancho de su territorio una riqueza envidiable. Esta maravillosa "bomba productiva" lamentablemente ha padecido los inevitables abusos de la corrupción que imperó desde su constitución, provocando una profunda inestabilidad en la población, la que se traslada hacia nuestros días. Y la localidad de San José de la Esquina no está exenta de esta cruel realidad.

En la actualidad, mas del 50% del país se encuentra bajo la línea de pobreza, y de la mitad restante sólo una minoría puede abastecer sus necesidades básicas. Es en este contexto, en el que la educación pasa a ocupar un lugar secundario en la sociedad. Las prioridades están más que claras: los sueldos sólo alcanzan para cubrir las necesidades de alimentación y de salud, haciendo crecer la ignorancia y otorgando más poder a los gobiernos de turno, y facilitando el crecimiento de la corrupción.

La realidad económica actual impide que los jóvenes puedan emprender su futuro y desarrollar al máximo sus capacidades intelectuales. Esto provoca el indudable desánimo y las numerosas frustraciones que en ellos se manifiestan. La desorientación que sufren los estudiantes, los lleva a elegir cualquier carrera sin que exista, a veces, una verdadera vocación para satisfacer en ciertos casos, las expectativas de los padres, y esto, lógicamente acarrea frustraciones.

En estos últimos años, el porcentaje de jóvenes que no tiene posibilidad de estudiar y se ve obligado a insertarse en el mundo del trabajo, es similar a la de aquellos que tienen la oportunidad de dedicarse solamente al estudio. Esta es la realidad en la que vivimos, sólo un número restringido de egresados puede continuar sus estudios terciarios. Frente a esta situación nos sentimos en la obligación de brindar una mirada positiva y optimista que permita proyectar un futuro mejor, basado en una educación equitativa.

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