| miércoles, 03 de diciembre de 2003 | Rusia mata al Protocolo de Kyoto El gobierno adelantó que le resulta "imposible" asumir el compromiso Rusia "no puede" ratificar el protocolo de Kyoto en su forma actual, dijo ayer Andrei Ilarionov, consejero económico del presidente ruso Vladimir Putin. "El protocolo de Kyoto en su forma actual plantea límites significativos al crecimiento económico de Rusia", dijo el alto funcionario, explicando que el mismo "no puede ser ratificado en su forma actual".
Ilarionov hizo estas declaraciones después de una reunión de Putin con empresarios europeos. "Es imposible asumir esta responsabilidad", que desembocaría en una limitación del crecimiento económico del país, insistió Ilarionov.
El consejero presidencial estimó que no sería justo que Rusia redujera sus emisiones de gases de efecto invernadero y frenara su propio crecimiento, cuando las naciones que producen la parte más importante de esas emisiones rehusan asociarse al protocolo, cuyo objetivo es reducir las emisiones de gases considerados responsables de la reducción de la capa de ozono de la atmósfera y del calentamiento del clima del planeta.
Rusia,cuyas emisiones de gas de efecto invernadero representan el 17 por ciento del volumen mundial, tendría que reducirlas, según el texto, cuando los países que producen más emisiones de dichos gases, como Estados Unidos (25 por ciento) y China (13 por ciento) no son concernidos, había argumentado ya el consejero de Putin en ocasión de una conferencia internacional sobre el clima que tuvo lugar en Moscú a fines de septiembre.
Inquietud en Milán La novena conferencia de Naciones Unidas sobre Cambio Climático se abrió anteayer en Milán (Italia). A la reunión, que se prolongará hasta el 12 de diciembre, asisten científicos, ambientalistas, ministros y jefes de Estado de más de 180 países.
Conocida como "Cop9", la Novena Conferencia de los Signatarios del Protocolo de Kyoto evaluará los esfuerzos que los gobiernos han hecho para enfrentar el cambio climático.
El punto más delicado de la agenda será el rechazo de Rusia al Protocolo de Kyoto, que se propuso como objetivo reducir hasta el año 2012 las emisiones de gases de efecto invernadero al ocho por ciento bajo los niveles del año 1990. Aunque ha sido firmado ya por 119 países, entre éstos no se encuentra Estados Unidos, el mayor contaminador de la atmósfera en el mundo.
Para alcanzar el 55 por ciento de las emisiones globales de gases de efecto invernadero, sin embargo, se requiere la ratificación de Rusia, responsable del más del 17% de las emisiones globales.
En una declaración previa a la conferencia de Milán, emitida en la ciudad alemana de Bonn, el secretario ejecutivo de la Convención sobre Cambio Climático, Joke Waller-Hunter, advirtió a los delegados que no subestimen los efectos del recalentamiento sobre el cambio del clima en el planeta.
"El hecho de que 2003 esté en vías de ser uno de los años más cálidos de que se tenga memoria debería ser una advertencia que todos deberíamos tomar en serio", dijo Waller-Hunter.
Según el científico Vincenzo Ferrara, de la Agencia Nacional Italiana para Nuevas Tecnologías, Energía y Medio Ambiente, el mes de septiembre pasado fue "el más cálido de los últimos 120 años". (AFP y DPA) enviar nota por e-mail | | |