Otro ataque a la Iglesia Católica

Como monseñor Aguer tiene una doctrina impecable y una trayectoria irreprochable, aparecieron los "presuntamente católicos con derecho a decidir" a escandalizarse porque este obispo ha prestado fianza a una persona y entonces sale a relucir la iglesia de los pobres y la iglesia de los ricos. Jesucristo fundó una sola Iglesia jerárquica en la que cabemos todos los bautizados. Hace un tiempo se ha desatado una campaña sistemática de ataques a la Iglesia Católica Apostólica y Romana, y ahora parece que las quejas salen desde dentro. Hay que decir que se confunden quienes quieren una Iglesia horizontal y democrática, por alzada de mano. Como no hay un monseñor Storni para condenar anticipadamente por los "massmedia", ni un padre Grassi, también condenado por anticipado a través de los medios, ahora sigamos con monseñor Aguer que no tiene por qué tener voto de pobreza y del que nunca he sabido dejara desamparado a los pobres en beneficio propio o de los ricos. Alguien tiene que salir a decir que estamos siendo gobernados por los Montoneros, las Madres y los gays y las lesbianas. Para ellos siempre hay espacios públicos y de difusión; yo me avergüenzo de la falta de valentía que a veces tenemos los católicos que callamos cuando hay que hablar. En mi profesión he dado centenares de fianzas y nunca salió en los diarios -no soy rica, ni necesito serlo para prestarla- de modo que monseñor Aguer tiene todo el derecho del mundo a prestar las fianzas que quiera, mientras esto no interfiera con su ministerio pastoral.

Doctora Nereida Brumat Decker