| sábado, 29 de noviembre de 2003 | Entre la especialización profesional y la formación académica La oferta de estudios de posgrado se expande en el ámbito de la UNR Especializaciones, maestrías y doctorados superan a las carreras de grado Marcela Isaías / La Capital Los posgrados se han convertido en un fenómeno educativo de los últimos años. Tan es así que la oferta de estos estudios en la Universidad Nacional de Rosario suman 119 carreras, superando las 76 de grado que se dictan en el mismo ámbito. El crecimiento no es casual y coincide con las exigencias que la ley de educación superior demanda hacia sus docentes respecto de una mayor formación académica. También se vincula con la idea de especialización y formación continua que exigen las profesiones en la actualidad.
La tendencia al desarrollo de las especializaciones, maestrías y doctorados en el campo de la UNR ha sido geométrico: en 1998 se dictaban 45 posgrados contra los 119 de hoy. Los números hablan de un panorama diferente en el campo de la educación superior, donde la formación ya no se limita al alcanzar el título, sino a la necesidad de perfeccionamiento constante.
El secretario académico de la UNR, Alberto Petracca, explica que la elección de los posgrados se vincula de distintas maneras con la disciplina que se trate. Así, los profesionales como abogados o médicos prefieren las especializaciones que hacen al ejercicio de su campo de acción; mientras que los investigadores y docentes se inclinan por las maestrías y doctorados.
La apreciación coincide con los números de cada facultad. Por ejemplo, la de Ciencias Médicas es la que más especializaciones dicta -en total 21-, seguida por Ciencias Económicas y Bioquímicas. En tanto que Humanidades y Artes es la que reúne el mayor número de maestrías, entre ellas la de educación superior, la formación necesaria para quienes enseñan en el ámbito de las altas casas de estudio.
Si bien, la ley de educación superior estipula que para acceder a un posgrado es necesario contar con el título de grado correspondiente, una reciente modificación a la norma habilita a quienes poseen títulos terciarios. De todas maneras, se sabe que las posibilidades de ingresar a una especialización, maestría o doctorado, dependerá de lo que cada comisión de admisión de las distintas facultades fije al respecto. "Quienes se deciden por un posgrados lo hacen con cierta trayectoria académica o profesional previa, con una finalidad clara", comentó al respecto Petracca.
Mejor formación La decana de la Facultad de Ciencias Médicas de la UNR, Raquel Chiara, coincide con la idea de que este crecimiento de posgrados responde a la necesidad de ofrecer mejor formación a los graduados. "Por eso, desde que asumimos la gestión nos dedicamos a hacer crecer la escasa oferta que había en ese momento de estos estudios", resalta al respecto.
Sucede que, además de los requerimientos que fija actualmente la ley de educación superior, medicina es considerada una carrera de riesgo y por lo tanto demanda una especial atención a sus profesionales. Hoy la facultad cuenta con una amplia oferta de estudios, reconocidos a nivel nacional, y acreditados por la Comisión Nacional de Evaluación y Acreditación Universitaria (Coneau) -o bien en vías de aprobación-.
Para Chiara esto es un hecho destacable, sobre todo si se entiende que además esta acreditación de titulaciones se está extendiendo, por convenios entre países, a todo el Mercosur. Entre las especializaciones más requeridas que dicta la Facultad de Medicina figuran las de médico generalista, geriatría, epidemiología, medico legista y médico laboral por citar algunas. También resalta la recuperación del doctorado, como tramo de formación profesional y académica.
Con la visión de multiplicación de los posgrados acuerda también el secretario de investigación y posgrados de la Facultad de Arquitectura de Rosario, Eduardo Sproviero, quien destaca que dicha casa de estudios trabaja orientada a la formación académica de sus docentes e investigadores con programa que atienden al doctorado, donde muchos se vuelcan a tomar cursos acreditables al mismo. También "en la oferta de cursos de actualización profesional, con temas más específicos sobre el campo laboral". En este caso, puso como ejemplo, los estudios sobre tasación de inmuebles urbanos, higiene y seguridad en obras, tratamiento vinculados a la problemática de la vivienda, entre otros.
Recordó que "no sólo se vuelcan a estas carreras arquitectos egresados de la UNR, sino que también asisten de otras universidades". Respecto de los costos comenta que se contempla una reducción de los mismos a los docentes de arquitectura, que pagan el 50% de la matrícula.
Un punto clave en el funcionamiento de los posgrados es precisamente el de los costos, que -por ley- deben ser autofinanciados por la propia universidad. Por lo tanto el arancel depende de lo que cada facultad fije sobre estos estudios. Sin embargo, para el secretario académico de la UNR, Alberto Petracca, es preciso diferenciar "entre los usuarios internos y los externos a la universidad", porque -manifestó- la universidad debe garantizar primero el acceso de sus docentes a estos estudios, "haciendo que se cursen con la mayor de las facilidades, luego estará en cada facultad implementar esta idea".
Por otro lado, Petracca destaca que la tendencia en la gestión del rector Ricardo Suárez ha sido la de "mantener y fortalecer los estudios de posgrado". enviar nota por e-mail | | Fotos | | En 1998 había 45 posgrados, ahora hay 119. | | |