Confirmaron el procesamiento de la banda de "poliladrones"

Acusan a ex jefes policiales de General López de liderar una red de delincuentes

Silvia Carafa / La Capital

Rufino.- La Cámara de Apelaciones en lo Penal de Venado Tuerto confirmó el procesamiento de los comisarios Jorge Villalba y Eduardo Pighin, por presunta asociación ilícita en concurso real con incumplimiento de deberes de funcionario público. La resolución fue unánime e implica la detención de todo el grupo que integraría una banda de policías y ladrones que actuó durante largo tiempo con impunidad en esta ciudad. Por la línea uniformada de la presunta organización quedaron detenidos Rubén Darío Pérez, Angel Vaños y Juan Carlos De Inocenti, quienes habían conservado la libertad, mientras se sustanciaba la apelación que ya concluyó.

A la vez se procedió a la detención de Sergio y Diego Lopetegui, dos de los civiles acusados. Los dos restantes, Oscar Abelardo Arias y David Clavero, estaban en prisión preventiva por procesos anteriores.

Por su parte, los comisarios Villalba y Pighin, acusados junto a Arias como cerebros de las actividades del grupo, fueron detenidos la semana pasada, después que la Cámara revocara la libertad provisional de los mismos, dispuesta por el juez de Rufino sobre la base de tratados internacionales.

Los vocales de la Cámara, Marta Juri, Gustavo García Méndez y Juan Rosso, confirmaron por unanimidad la decisión del juez de Instrucción de Rufino, Omar Guerra. Según entendió el magistrado, ambos grupos formarían una asociación ilícita autora de varios atracos en la zona urbana de Rufino. Esta banda de delincuentes habría gozado de impunidad precisamente porque sus líderes era las máximas autoridades policiales de la zona. Los episodios que se investigan comenzaron en 1999.

Las pruebas que llevaron a Guerra a dictar el auto de procesamiento se acumulan en un extenso expediente que incluye relatos insólitos y reveladores, hechos ante la Justicia por los propios delincuentes.

La decisión de la Cámara de Apelaciones fue confirmada ayer por el secretario Carlos Borgarello. Ahora la causa volverá a manos de Guerra para complementar medidas y a la espera de la acción del fiscal del caso. Una vez cumplidos estos trámites será remitida al juez de Sentencia, Fernando Vidal.

Uno de los aspectos insólitos de la causa es la situación de Oscar Abelardo Arias, quien por un delito anterior se encontraba cumpliendo una condena domiciliaria por razones de salud. Esta supuesta dolencia no le habría impedido orquestar las actividades de la banda y regentear el cabaret Los Pinos.

Para cumplir con la decisión de la Cámara ayer se detuvo a los suboficiales Vaños y Pérez, mientras que el oficial De Inocenti ya se encontraba en esa situación en el marco de otra causa. Por su parte, Arias fue trasladado a Rosario para que continúe con su prisión preventiva. Villalba y Pighin enfrentan otros procesamientos por peculado de efectos y de servicios, trámite que en la actualidad está apelado.

El juez Guerra es rosarino y hace 15 años está radicado en el sur provincial, lugar en el que desarrolló su carrera judicial. Ayer, cuando la Cámara confirmó su trabajo, dijo estar satisfecho y orgulloso por el funcionamiento institucional. "Es el triunfo de una Justicia independiente e imparcial, más allá de quienes sean las personas involucradas en los hechos", explicó.

"Es un triunfo de la Justicia", dijo el juez.