| miércoles, 19 de noviembre de 2003 | CAPITAL FEDERAL Un asaltante violó a una empleada en una farmacia Buenos Aires.- Un ladrón asaltó una farmacia del barrio porteño de Constitución y al no encontrar dinero en la caja obligó a desvestirse a las dos mujeres que atendían y violó a una de ellas.
Ocurrió ayer en un comercio de la avenida Independencia al 900, casi esquina Bernardo de Irigoyen, a una cuadra de la seccional 4ª de la Policía Federal. Tras el ataque sexual, el ladrón se topó con el dueño de la farmacia, a quien le robó los 50 pesos que tenía en su billetera y se llevó viejos australes de una caja fuerte, desconociendo -aparentemente porque se trataba de un extranjero- que eran billetes de colección.
El delincuente ingresó al local de la Farmacia Tacuarí ubicada en la avenida Independencia 980, cerca de las 13 de ayer, y amenazó con un cuchillo a la encargada y a una empleada a quienes les exigió la entrega de la recaudación. Al no encontrar dinero, el ladrón hizo pasar a las mujeres a la trastienda y las obligó a desvestirse.
Según los voceros policiales, primero arrojó al piso a la mayor, de 56 años, y la golpeó. Luego, llevó al baño a la otra mujer, de 46 años, y la sometió sexualmente. Pero la odisea no terminó allí, ya que luego el propietario de la farmacia, identificado por las fuentes como Jorge Boquete, llegó a su local y se encontró con el ladrón. El asaltante lo redujo, le sacó los 50 pesos que tenía en su billetera y luego se dirigió a una caja fuerte, que tenía la llave puesta, donde tomó una suma no determinada de australes, sin importarle que se trataba de dinero fuera de circulación.
Por ello y por la descripción que dieron las tres víctimas, los investigadores están convencidos de que el delincuente es "una persona de unos 40 años y aparentemente sería de origen peruano o boliviano".
La farmacia asaltada cuenta con un sistema de alarma que las empleadas no pudieron accionar, según relataron las fuentes. Es que según contaron los propios vecinos, esa farmacia fue asaltada en varias ocasiones. "Siempre roban en esta farmacia", dijo a la prensa una mujer que vive en la misma cuadra.
Pese a que la comisaría cuarta se encuentra a sólo 80 metros del local, la policía no advirtió el robo. "Tratamos de prevenir el delito. Estamos en forma permanente en la calle, pero estamos limitados en el personal. Esto sucedió en el interior del local donde desde el exterior no se observó ninguna anormalidad", dijo el jefe de la seccional. (Télam) enviar nota por e-mail | | Fotos | | La farmacia donde ocurrió el abuso. | | |