| domingo, 09 de noviembre de 2003 | Piden por un muchacho desaparecido hace 11 meses La familia de Juan Carlos Ramírez, un joven que permanece secuestrado desde hace once meses luego de que cuatro delincuentes se lo llevaran en la localidad bonaerense de José León Suárez, realizó ayer un desesperado llamado para que se esclarezca el caso.
Los familiares de la víctima recibieron doce llamados de los secuestradores que pidieron inicialmente medio millón de dólares para liberarlo, pero el 19 de diciembre del año pasado cortaron las comunicaciones y desde ese día no se tuvieron más noticias.
Por el hecho, el juez federal de San Isidro, Roberto Marquevich, detuvo en abril último a cuatro personas que diez días después fueron liberadas y ahora la causa está a cargo de su par de San Martín, Alberto Suárez Araujo.
Desesperación y angustia "Nadie nos escucha, estamos con una angustia terrible. Nos quieren poner que mi hijo era narcotraficante o que era un delincuente pero nada que ver, con eso quieren tapar la inoperancia judicial", dijo la madre del muchacho, María Domitila Ramírez.
Todo comenzó el 10 de diciembre del año pasado, alrededor de las 23, cuando el joven se dirigió desde la casa de su novia hasta el domicilio de una amiga, en avenida Márquez y la calle 1º de Agosto, en Villa Martelli.
Ramírez, por entonces de 27 años, se encontraba en una combi Renault Trafic suya con la que trabajaba como transportista. En un momento aparecieron cuatro personas que se presentaron como policías y le exigieron a la chica que entre a su casa, tras lo cual dos de los desconocidos llevaron al joven en su camioneta, mientras los restantes los siguieron en un Fiat Palio rojo. A las 0.30 del 11 de diciembre, la familia de Ramírez, residente en la localidad de Villa Martelli -donde manejan un locutorio y un almacén- recibió un llamado telefónico, donde una voz anónima les reclamó el pago de 500.000 dólares.
"Apenas recibimos el primer llamado, denunciamos el hecho en la comisaría de Villa Martelli, y nos derivaron a la DDI de Vicente López", dijo la madre del muchacho.
La camioneta fue encontrada al día siguiente a 15 cuadras de la comisaría de Villa Martelli con manchas de sangre en su interior, pero no se pudo determinar a quién pertenecían.
"Nosotros le pedimos a la policía tener los rastros sanguíneos, pero ocho meses después nos dijeron que se perdieron", por lo que no se pudieron realizar las pericias de ADN, dijo angustiada la madre del muchacho.
Al primer llamado, les siguieron otros en los que los secuestradores bajaron sus pretensiones a 30.000 dólares o 100.000 pesos que tenían que entregar en una bolsa negra en un lugar que les iban a precisar.
"El último llamado fue el 19 de diciembre. Les dijimos que conseguimos 30.000 pesos pero nos contestaron de eso, el doble para arriba", dijo la mujer.
En la búsqueda de la verdad, los familiares se reunieron esta semana con el presidente Néstor Kirchner, quien -según precisaron- "dijo que iba a hacer todo lo posible" para ayudarlos. (DyN) enviar nota por e-mail | | |