Mató a un chico que lo quiso secuestrar

Un comerciante se trabó a los balazos dentro de su auto, mientras lo llevaban encañonado luego de asaltarlo

Un comerciante que fue asaltado en un cajero automático y tomado de rehén mató de un balazo en la cabeza al delincuente de 15 años que lo tenía cautivo dentro de su propio automóvil, en la localidad bonaerense de Villa Martelli, según fuentes judiciales y policiales.

El hombre -que resultó baleado en una mano y cuya identidad fue preservada por todas las fuentes del caso- quedó imputado de homicidio, pero fuentes judiciales revelaron que "en principio quedó acreditado que hubo intercambio de disparos y actuó en legítima defensa".

Las fuentes de la investigación mantuvieron desde anoche un absoluto hermetismo en torno a la identidad del comerciante -la policía había dicho que se trataba de un abogado-, que tenía un permiso especial de portación de arma, una pistola Browning calibre 9 milímetros como las de la policía.

El hecho se inició anteayer alrededor de las 20.30 en un cajero del Banco Río ubicado en Libertad y San Martín de la localidad de Florida, partido de Vicente López.

El comerciante extrajo de su cuenta 300 pesos y al salir del cajero fue abordado por dos delincuentes armados que lo tomaron de rehén.

Uno de los delincuentes se subió al automóvil BMW cupé de la víctima, a quien obligó a conducir a punta de pistola, mientras su cómplice los seguía atrás en un auto de apoyo.

El enfrentamiento se produjo cuando el auto conducido por el rehén llegó hasta Villa Martelli y se topó con un móvil policial que patrullaba la zona, en el cruce de Laprida y Blanco Encalada.

Al advertir la presencia policial el delincuente se puso nervioso, momento que fue aprovechado por el comerciante.

Las fuentes contaron que, en una rápida maniobra, el hombre sujetó el cañón de la pistola del delincuente con su mano izquierda, mientras que con su derecha extrajo de entre sus ropas su arma y le disparó a la cabeza.

No obstante, el comerciante resultó herido porque el ladrón gatilló cuatro veces: una bala le perforó la palma, otra le rozó un dedo, una tercera impactó la zona del airbag del tablero del auto y la cuarta se perdió por la ventanilla del conductor que estaba abierta, según indicaron las fuentes.

El auto BMW terminó subido a la vereda contra un local de venta de electrodomésticos. (Télam)