| domingo, 09 de noviembre de 2003 | El cazador oculto: el exquisito gusto de las movileras Ricardo Luque / La Capital Cindy Lauper tiene razón. Las chicas sólo quieren divertirse. Y, aunque se cuidan bien de que no se les note, cuando salen a la calle son de temer. Más si son jóvenes, intrépidas y recorren incansablemente la ciudad en busca de noticias. Porque, hay que admitirlo, cuando las movileras salen de cacería son insaciables. Y ahí están sus colegas siempre bien dispuestos a complacerlas. Pero la cosa no es tan fácil. Las chicas tienen gustos exquisitos. Cómo será que no se dejan deslumbrar por la simpatía desbordante de Alberto Furfari, ni por la figura atlética del Toto Borderi y mucho menos por las miraditas pícaras de Angel Granato, que, como todo el mundo sabe, de ángel tiene nada más que el nombre. Es más, en el top five de movileros, que votaron en una sesión secreta y regada de buen vino, no hay espejitos de colores. Sólo, piedras preciosas. Al menos eso es lo que dicen. Lo cierto es que la nómina despierta dudas. El quinto lugar quedó, después de una ardua disputa, en manos del crédito de LT3 Pablo Kassabián. Su postulación, impulsada por el ala fundamentalista de la barra, despertó gran entusiasmo. Su parecido con Osama Bin Laden llevó a una de sus partidarias a asegurar "si te agarra te tumba como a las Torres Gemelas". Juan Mascardi se tuvo que conformar con el cuarto puesto. El cronista de Cablevisión, que aprendió a titular en la escuelita de Héctor Ricardo García, no trepó más alto por sus excesos de romanticismo. Y no es para menos. Una cosa es tener corazón y otra muy distinta es lagrimear escuchando a Julio Iglesias. Ahora recio, lo que se dice recio, es Miguel Moreno, el movilero matutino de la 3, que gracias a su pose de machote mexicano logró ubicarse en el tercer puesto. El Negro, como apodan al muchacho sus colegas, no llegó más alto simplemente porque tanta virilidad en estos tiempos despierta sospechas. El que se ganó, sin discusiones, el segundo puesto fue el bueno de Pablo Procopio. Las chicas aseguran que el principito de Radio Dos, bajo su aspecto de cordero, esconde un lobo feroz. Pero el premio mayor se lo llevó el benjamín de Cablehogar, Martín Pigassi. Y lo más curioso es que la decisión fue unánime. ¿Por qué habrá sido? enviar nota por e-mail | | |