Colombia: el izquierdista Garzón ganó la alcaldía de Bogotá

Bogotá.- El izquierdista y antiguo líder sindical Luis Eduardo Garzón fue elegido este domingo alcalde de Bogotá, considerado el segundo cargo más importante de Colombia tras la presidencia, en un hecho sin antecedentes en esta ciudad de más de siete millones de habitantes.

Garzón, quien reemplazará a partir del 1 de enero al filósofo Antanas Mockus, obtenía cerca del 47% de los votos contra 40% de su inmediato seguidor, el independiente Juan Lozano.

Conocido simplemente como Lucho, Garzón, de 52 años y líder del Polo Democrático Independiente, se convirtió así en el primer alcalde de izquierda en la capital, un hecho inédito en un país que en los últimos 180 años fue gobernado exclusivamente por los partidos Liberal y Conservador.

El ex aspirante a la elección presidencial -que ganó Alvaro Uribe en mayo de 2002- recién pasó en la última semana a liderar las preferencias tras registrar un sostenido repunte en la campaña, cuyas encuestas dominó Lozano por largo tiempo.

La victoria de Garzón tiene un gran impacto en el escenario político nacional, según analistas, que recuerdan que aquél es un abierto contradictor de las políticas de seguridad y económica de Uribe, cuya gestión es aprobada por más del 70% de los colombianos tras 14 meses de gobierno.

Garzón también lideró la abstención a un referendo impulsado por el mandatario para cambiar algunas costumbres políticas e implantar medidas de ajuste fiscal, en lo que Uribe consideró un "plebiscito contra el terrorismo y en favor de la democracia", cuyos resultados eran inciertos este domingo tras su votación el sábado.

Pero además de su evidente acogida, la campaña de Garzón marcó un hito luego de que el mayoritario Partido Liberal retiró hace una semana la candidatura del ex ministro Jaime Castro y adhirió al Polo Democrático -que integran ex guerrilleros, indígenas e intelectuales-, en medio de una profunda crisis en la colectividad.

La aspiración del ex líder de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT) -principal agremiación sindical del país- fue respaldada incluso por el ex comandante de las Fuerzas Militares general Manuel Bonnet y por el ex jefe del servicio secreto (DAS) general Miguel Maza.

Garzón, de origen popular y amigo del presidente brasileño Luiz Inacio Lula da Silva, plantea un modelo de ciudad que da prioridad al desarrollo social de los pobres, lo que, según él, marca una gran diferencia con administraciones recientes que han privilegiado la modernización de Bogotá.

Se estima que el 50% de los habitantes de la capital vive en la pobreza, por lo que el ex presidente de la CUT afirma que a la ciudad "la han pretendido convertir en una Versalles cuando su situación social se parece cada vez más a la de Calcuta."

Comentaristas locales sostienen que el triunfo de Garzón es positivo porque demuestra que la izquierda democrática ha logrado un espacio en Colombia, tras años en que esta corriente fue objeto de ataques de la ultraderecha que cobraron miles de vidas.

Sectores opositores, sin embargo, cuestionan la poca experiencia administrativa de Garzón y consideran que la adhesión de los liberales supone una cortapisa para su gobierno y podría derivar en pactos burocráticos, lo cual ha sido negado por el nuevo alcalde, quien reivindica su independencia. (AFP)