Reflotan el "proyecto Hammerly"

Mutuales: vuelve la pelea por códigos de descuento

Las entidades temen ser discriminadas en el sistemade préstamos a los empleados de la provincia

Las federaciones de mutuales del norte y sur de Santa Fe encendieron la luz de alarma frente a la súbita resurrección de un proyecto para regular el sistema de código de descuentos por préstamos a empleados de la provincia, que mañana podría ser tratado en la Cámara de Diputados.

El proyecto impulsado por el presidente de la Cámara baja provincial, Alberto Hammerly, fue "congelado" el año pasado a raíz del rechazo de un centenar de mutuales santafesinas, que entendían que su texto favorecía abiertamente a las mutuales de origen sindical. La iniciativa salió del freezer la semana pasada cuando la comisión de Asuntos Institucionales de la cámara baja le dio despacho favorable y se aprobó un pedido de preferencia para su tratamiento en el día de mañana.

"Coincidimos en la necesidad de una ley que ordene el sistema de códigos de descuento pero queremos participar de la elaboración de un proyecto consensuado y no que se avance unilateralmente en una iniciativa que encierra serios riesgos para las mutuales y que se puede transformar en un gran negocio para unos pocos", señaló Víctor Rosetti, presidente de la federación que agrupa a las mutuales del sur de Santa Fe.

A diferencia del año pasado, cuando las tintas estaban cargadas sobre la presunta exclusión de las mutuales en beneficio de sus colegas de origen sindical, el principal foco de conflicto es ahora la participación en el sistema del Nuevo Banco de Santa Fe, entidad a la cual, según Rosetti, se le abren las puertas para participar con "ventajas".

La discusión sobre la reglamentación de los códigos de descuento es de vieja data y nació frente a la necesidad de ordenar el sistema que rige para el otorgamiento de préstamos o prestación de servicios a los 100 mil empleados públicos de la provincia por parte de mutuales. En este esquema, los créditos se cobran a través del descuento directo sobre el sueldo.

El llamado proyecto Hammerly pone un límite al descuento que pueden hacer las mutuales, algo que las federaciones que las agrupan apoyan aunque con diferencias en el porcentaje de afectación. Además propone la creación de un Centro Unico Autorizado en el cual se registren las entidades que cumplimenten una serie de requisitos y que funcione como órgano de administración del sistema. De nuevo, aunque la figura no es objetada por las organizaciones de "la economía social", estos entes sí advierten que la falta de precisión sobre el sistema de representación en ese organismo posibilita que "se transforme en un elemento de discriminación para digitar quienes entran o no en el sistema".

Rosetti y su par de la federación de mutuales del norte provincial, Néstor Zenklusen, enviaron una nota a Hammerly en la que le expusieron su propio proyecto de regulación. Allí se propone un límite del 70% a los descuentos que se pueden autorizar, una representación igualitaria en la comisión asesora del sistema y se rechaza la participación del NBSF en el sistema, por tratarse de "una entidad con fines de lucro".


El temor de las mutuales
"Es de nuestro interés que el dinero de los santafesinos vuelva a los mismos a través de la participación de actores locales no lucrativos", señalaron y advirtieron que en el proyecto de ley oficial "se otorgan ventajas significativas al ente financiero provincial". Estos beneficios se expresan en que al banco no le exigen constituir garantías, mientras que a las mutuales sí. El temor de las mutuales es que el agente financiero oficial, que ya ofrece préstamos a los empleados públicos a través de las cuentas sueldo, tendría con los códigos de descuento una herramienta adicional para captar la preferencia de los empleados.

Para el titular de la Asociación Empresaria de Rosario, Elías Soso, los legisladores tendrían que apuntar a que este sistema ayude a la promoción de la economía social, a través de mutuales y cooperativas.

Las entidades mutualistas piden discutir un nuevo proyecto. Para Rosetti, se trata de respetar los siguientes puntos: no discriminación a las mutuales no sindicales, precisión en la ley para no dejar cuestiones esenciales libradas a la reglamentación por parte del Ejecutivo, descentralización del centro único de autorización (pretende que funcione en Rosario y Santa Fe) y rechazo a la competencia desleal.

Víctor Rossetti criticó el proyecto.