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 lunes, 20 de octubre de 2003

EL CRIMEN DE GUSTAVO ARTIGAS
Testimonio que compromete a una familia
La declaración del puestero Carlos González, testigo del homicidio, vincula a los cinco detenidos por el hecho

La declaración de Carlos Alberto González, el puestero de la chacra de Piñero donde fue asesinado el pasado jueves 9 de octubre el abastecedor de carnes Gustavo Artigas, complicó aún más la situación procesal de los cinco integrantes de una familia que se hallan detenidos por el caso. El hombre, que estuvo escondido en el sur de Córdoba desde el día del hecho, "declaró directamente ante el juez de la causa, dijo haber visto todo lo ocurrido y quedó preso por encubrimiento", sostuvo un vocero de la pesquisa.

Durante una década, Gustavo Artigas convivió con María Enriqueta Donadío y los cinco hijos que la mujer tenía de un matrimonio anterior: Natalia Diéguez, de 25 años; Valeria, de 23; Martín, de 22; y los mellizos V. y P., de 17 años. Cuando la relación llegó a su fin, la mujer y sus hijos se quedaron con una carnicería que era del hombre y que está ubicada en la zona sur de la ciudad, y con una pickup. Además, la mujer mantenía una disputa con su ex pareja por el reclamo de la cuota alimentaria que le correspondía por el único hijo en común que tenían, de 9 años.

Pero, según los investigadores, esos bienes "no alcanzaron para saldar una vida que algunos de los detenidos definen como tortuosa y de verdugueos permanentes para con la mujer". Por eso sostienen la hipótesis de que el crimen fue "un complot para quedarse con todos los bienes de Artigas".

El abastecedor fue asesinado de tres balazos la mañana del 9 de octubre en el establecimiento agropecuario que alquilaba en Piñero. Al momento del crimen llevaba consigo 20 mil pesos en efectivo y otros 10 mil en cheques que tenían por destino el pago a un frigorífico de la zona y que no fueron hallados. Por eso, para los investigadores, la hipótesis más concreta es que el hombre fue ultimado en un complot familiar para quedarse con todo el dinero.


Los datos de un remisero
Los pesquisas llegaron hasta González a través del relato de un remisero que el día del homicidio llevó hasta Piñero a Natalia y a P. Los jóvenes le pidieron que los esperara sobre la ruta y al poco tiempo la chica volvió acompañada por un hombre (el puestero). Entonces viajaron hasta la terminal de ómnibus. Desde allí se dirigieron a la ciudad cordobesa de Arias donde los Donadío tienen familiares. Allí se escondió González y desde ese lugar fue traído a Rosario la madrugada del sábado.

Ante el juez que lleva adelante la causa dijo "haber visto todo" y, según las fuentes, implicó a toda la familia en un hecho "con trasfondo económico". "Salvo Valeria, que no estaba en Rosario el día del crimen, todos los demás están seriamente implicados en el crimen. Uno por matar a Artigas y los otros por encubrimiento en diferentes grados y circunstancias", dicen los pesquisas al referirse al ocultamiento del cadáver, del arma y del auto de la víctima.

En ese orden estarían claros los roles que al menos dos de los miembros de la familia cumplieron el día del crimen: V., de 17 años, habría disparado el arma que mató a Artigas; su hermano Martín el encargado de llevar el auto de Artigas hasta Fray Luis Beltrán; y Natalia la de acompañar al puestero a su escondite de Córdoba. Los demás "estuvieron presenten en el lugar y colaboraron en el encubrimiento".

Pero para los abogados Carlos Blas Tuero y René Biliato (defensores de Donadío y los hermanos Natalia y V. Diéguez), sus clientes se enteraron de lo ocurrido varias horas después del hecho. "Nadie sabía que V. se iba a encontrar con Artigas y nadie pudo prever lo que el chico iba a hacer". En ese orden, sostienen que "nadie sabía de la existencia del dinero que dicen que la víctima llevaba consigo" y sostienen que "había una situación familiar no resuelta que con un diálogo podría haberse solucionado, pero que terminó en tragedia".

Finalmente, los abogados manifestaron que el homicidio "fue la reacción desmedida de un chico (V.) a una situación familiar" y agregaron que "no tuvo noción de lo que estaba haciendo".

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