El remate no tuvo oferentes y los jubilados compraron su propia casa

A pesar de que el juez Rodolfo Bruch decidiera no suspender el remate de la vivienda única de Alberto Alderete y Wity Inés Medina, el jubilado ferroviario y su esposa, una ex docente ciega, compraron su propia casa de Garay 5116 a un valor apenas superior al fijado para la base de la subasta del acto que acaba de terminar, y merced a la solidaridad de familiares y vecinos.

Alberto Alderete compró la casa por 5.800 pesos (la base era de 5.650) con el aporte de conocidos y puso fin a una pesadilla que comenzó en los años 90, cuando un amigo le pidió que le saliera de garante para un alquiler y jamás pagó.

El acto, en el que no hubo oferentes, se llevó a cabo esta tarde en la Asociación de Martilleros, Entre Ríos al 200, donde miembros de la Asociación en Defensa de la Vivienda Unica (Adeviu) montaron una carpa de repudio, por lo que la policía estableció un vallado en la zona desde temprano.

Movilización y repudio en la sede de Martilleros.