 | lunes, 20 de octubre de 2003 | Dispensario "Doctor Maradona", de Funes ¡Gracias Marcelo! Por si no te acordás, el domingo 12 de octubre, a las 10.30, atendiste a mi hijo accidentado fuertemente en un dedo de su mano debido a un corte producido por una sierra. Primero no quise ver pero después me animé. Te vi trabajar con tanta responsabilidad, con tanto amor en lo que hacías, con tanto conocimiento, con tanta dedicación que hasta él se quedó sorprendido y te preguntó: "¿y vos como te llamás?". "Marcelo, contestaste, yo hago las guardias de enfermería todos los domingos". Ni tu apellido sé. Pero aquí eso no cuenta, cuenta todo lo otro. Por eso, como madre, te doy las gracias. Con personas como vos pienso que no todo está perdido. Era el dispensario "Doctor Esteban L. Maradona", te felicito, hacés honor a su nombre. Destaco la atención de este empleado que si es que no sucede merecería ser considerado por todos sus superiores. Nuevamente gracias Marcelo y hago extensiva mi gratitud a la doctora Patricia, médica querida y respetada por toda la gente de la zona.
Lidia Zizis
enviar nota por e-mail | | |