Garzón: "Argentina tiene que cerrar sus heridas"

El magistrado español aconsejó cómo ajustar cuentas con el pasado de la dictadura militar

El juez de la Audiencia Nacional de España Baltasar Garzón consideró ayer que en Argentina "es necesario ajustar cuentas con el pasado" luego de que se reabrieran las causas por los crímenes de lesa humanidad durante la última dictadura militar, debido a la nulidad de las leyes de obediencia debida y punto final.

"Creo que era necesario, de alguna forma, para ajustar cuentas con el pasado y que no quede abierta una herida que supura desde hace muchos años", sostuvo Garzón al referirse a la nulidad de las leyes que no permitían juzgar a los militares argentinos acusados por la represión y desaparición de militantes y ciudadanos entre 1976 y 1983.

Garzón arribó ayer a Buenos Aires en un vuelo regular de la compañía española Iberia y fue recibido en el aeropuerto internacional de Ezeiza por el jefe de Gobierno porteño, Aníbal Ibarra, y el fiscal de Bahía Blanca Hugo Cañon.

El magistrado español destacó que para que se logre la nulidad de las leyes y la posterior reapertura de las causas contribuyó tanto la investigación que él realizó desde España como "el trabajo de los organismo de derechos humanos, la acción de la Justicia, del Parlamento y de la conducción política".

De esta manera, Garzón resaltó la decisión política del gobierno del presidente Néstor Kirchner de llevar a cabo los juicios en el país, lo que hizo que el gobierno español evitará cursar los pedidos de extradición a Madrid de 40 militares para juzgarlos en ese país por la desaparición de ciudadanos españoles.

En ese sentido, el juez de la Audiencia Nacional española reconoció que no le interesa en qué lugar se lleven a cabo los juicios. "En Argentina o en España, lo importante es que se cierren las puertas a la impunidad", dijo.