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 domingo, 19 de octubre de 2003

Obeid promete un gobierno de grandes transformaciones
"Binner me decepcionó"
Por primera vez, el mandatario electo criticó con dureza al intendente. Habrá caras nuevas en el gabinete

Daniel Leñini / La Capital

El gobernador electo Jorge Obeid aseguró que el suyo será un gobierno "transformador" y "no más de lo mismo", y que en el gabinete que dará a conocer a fin de mes "habrá caras nuevas" y figuras de otros partidos. "Mi anterior gestión (1995-1999) fue buena, todo el mundo la valora, pero esta vez habrá transformaciones en serio. Aquí hay un tren que pasa y no lo quiero perder", dijo en un una entrevista con La Capital.

Un mes y medio después de las elecciones que lo consagraron, el diputado nacional expresó: "Soy gobernador gracias a Rosario, porque en Santa Fe perdí". Casi compungido, el futuro jefe de la Casa Gris evidenció que se abrieron grietas en la relación con el ex candidato a gobernador por el lema Partido Socialista y actual intendente rosarino, al sostener que "Hermes Binner me decepcionó". En esa misma línea, amplió el razonamiento: "El decidió una campaña electoral con el eje en agredir, insultar, maltratarme. Me afectó, debo confesarlo, porque creo no haberlo merecido".

-¿A qué se refiere cuando dice que el eje de su gobierno va a estar en lo educativo?

-Quiero expresar que habrá un salto en la calidad de la escuela pública. A las maestras y directoras las fueron recargando de tareas ajenas a lo pedagógico, las transformaron en ecónomas del comedor escolar, jefas de la guardería, enfermeras... Nosotros vamos a sacarles la responsabilidad sobre esas actividades que transferiremos a (la Secretaría de) Promoción Comunitaria. No será de un día para otro, lógico, porque habrá que seleccionar otros ámbitos que podrán estar cercanos a la escuela o en la misma escuela. Eso lo vamos a diseñar.

-A propósito de transformaciones. Por 7.100 kilovatios de consumo, la EPE cobra 1.650 pesos y Edenor 882. Como se observa en estas facturas, se trata de dos edificios de consorcios, uno en Rosario y el otro en la Capital Federal. Léalas...

-Si la conclusión que usted pretende sacar es que es mejor que la EPE sea privada le anticipo que estoy en absoluto desacuerdo. Las facturas de la EPE tienen impuestos municipales que la Capital Federal no aplica; de todas maneras acepto que la tarifa es más cara como consecuencia de la falta de eficiencia y el fraude. Estoy convencido que el fraude aumentó mucho en los últimos años, casi podríamos decir que la Empresa Provincial de la Energía compra dos kilovatios y le roban uno. Hay que bajarlo y hacer competitiva la tarifa. Pero con la EPE en manos del Estado.

-Es para tomarlo con seriedad. Primero porque se paga con puestos de trabajo: comercios y bares que pagan 2.500 pesos de luz, quizá tomarían más empleados con un precio competitivo. Y, además, porque el presidente Néstor Kirchner se plantó y no cedió ni un seis por ciento a las privatizadas. En Santa Fe, por encima de los 1.000 kilovatios, se paga el doble.

-Lamentablemente en vez de haberse seguido las transformaciones que nosotros habíamos iniciado hace cinco años se entró en la aventura privatista que fracasó y que lo único que hizo fue interrumpir el proceso. Paciencia.

-Para cumplir las transformaciones necesitará las leyes. ¿Por qué está seguro de obtenerlas si contará nada más que con 13 diputados propios sobre 28 oficialistas y 22 opositores?

-Porque haré lo necesario para lograr los acuerdos. Y porque todos hemos madurado. Quiero la reforma del sistema judicial para avanzar al juicio oral y los fiscales por distrito, la reforma electoral y la reforma de la Constitución para crear el Consejo de la Magistratura, encargado de seleccionar a los jueces, y la fiscalía de investigaciones administrativas en manos de la oposición. También para establecer la autonomía a Santa Fe y Rosario de manera que dicten sus propias cartas orgánicas y su política impositiva. Y voy a crear la Secretaría de Derechos Humanos. Estoy convencido de que con Kirchner de presidente un gobierno transformador en Santa Fe es posible. Quiero hacer un gobierno movimientista y plural, como es el peronismo.

-¿No le molesta aún después de las elecciones tanto coqueteo del gobierno nacional con el intendente Binner? No hay dirigente justicialista de Santa Fe que merezca tantos halagos: todos los días dicen que es "impecable", una persona "excelente" y que se piensa en su incorporación al Ejecutivo.

-Yo he recibido muchos halagos no solo del presidente sino de su equipo de colaboradores, y eso me hace sentir muy feliz. Respecto al tema de Binner...(piensa). A mi Binner me decepcionó. Y hablo de lo humano. Tuve una muy buena relación con él, siempre lo traté bien, jamás le dediqué una agresión; y él decidió una campaña electoral con el eje en agredir, insultar, maltratarme. Me afectó, debo confesarlo, porque creo no haberlo merecido. A mi me parece que Binner se equivoca creyendo que porque plantea esta especie de mimetización con el peronismo a través de la transversalidad... Se equivoca si el objetivo que está buscando es hacer esto para conseguir un cargo en el gabinete nacional. Me parece mucho más digna la posición de Lilita Carrió que se asume como oposición y dice: "Soy oposición".

-También es discutible que sea "el peronismo" el que ocupe el poder. Hay quienes entienden que en realidad se está frente a una versión de la Alianza, corregida desde la izquierda. Que se trata del mismo electorado que viene ganando las elecciones desde el 97.

-Yo creo que el peronismo es uno solo, y de lo que se trata es de matices. Y que no deben preocupar porque el debate enriquece las ideas. El drama del peronismo durante los años de (Carlos) Menem fue que se prohibió el disenso, se frenó el aporte intelectual y el movimiento quedó anquilosado. No tiene que asustar que haya diferentes posiciones sobre un mismo tema entre Duhalde y Kirchner. Pero es el justicialismo el que gobierna.

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Obeid: "Hay un tren que pasa, no lo quiero perder"

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