Apertura 2003

Talleres sube, Racing se hunde

Los cordobeses ganaron 2 a 0 en el estadio Olímpico

Talleres consiguió anoche como local su segunda victoria consecutiva en el torneo Apertura y el vencido fue el Racing Club de Angel Cappa, que con el 2-0 quedó lejos de salir de un pozo que cada vez parece más profundo.

Los cordobeses, con los goles del uruguayo Víctor Piriz Alvez y Mariano Córsico, uno en cada capítulo, se entusiasman en su lucha por conservar la categoría.

Los de Avellaneda llegaron al octavo partido sin ganar por lo que se agravó la situación de su conductor.

El primer tiempo dejó en evidencia la profunda crisis que atraviesa Racing. El entrenador Angel Cappa sigue sin encontrarle la vuelta al equipo y se nota que hay problemas en todas las líneas.

La defensa padeció ante el atacante uruguayo Víctor Piriz Alvez, el mediocampo tuvo muchas dudas y sólo se destacó Lucas Rimoldi por su manejo. A la ofensiva de los de Avellaneda se la vio muy débil, algo de Diego Milito y nada más.

Talleres ganó el parcial porque fue la contracara de su adversario. El equipo de José Pastoriza fue sólido, ordenado y prolijo y con esas virtudes justificó el resultado provisorio.

Antes del gol los racinguistas llegaron mediante dos réplicas, pero Víctor López tapó el remate de Milito y el arquero Marcos Gutiérrez se quedó con el disparo imperfecto de Gastón Fernández.

El conjunto cordobés sacó la ventaja porque Juan Pablo Avendaño estuvo atento para recoger el rebote que dio Mario Cuenca, quien había sido exigido por el cabezazo de Piriz Alvez.

Abajo en el marcador, el visitante tuvo una chance importante en otra escapada de Milito, pero el envío rasante del delantero internacional fue controlado por Gutiérrez.

Sobre el final de esa etapa dio la impresión de que el capitán Claudio Ubeda le cometió infracción dentro del área a Julián Maidana, pero la opinión del árbitro Oscar Sequeira fue diferente.

En la acción siguiente, Lucas Rimoldi buscó soluciones desde la media distancia y la pelota pegó en el travesaño.

Durante los primeros 7 minutos del segundo período Racing dispuso de tres ocasiones como para empatar, pero después se desinfló y sus dificultades reaparecieron.

Talleres volvió a basarse en la solvencia de Gutiérrez, en la capacidad para recuperar la pelota que tienen sus volantes centrales, Maximiliano Salas y el capitán Sebastián Carrizo; en la creatividad que ofrece Luciano De Bruno, y en la peligrosidad que genera Piriz Alvez.

Encima, Córsico con un cabezazo certero tornó la distancia inalcanzable para los albicelestes.

Talleres se levanta y Racing de ninguna manera logra salir de un pozo demasiado profundo. (DyN)