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 sábado, 18 de octubre de 2003

Procesan a un cuñado de María Marta
A Guillermo Bártoli lo acusan de dar datos falsos en la confección del acta de defunción de la socióloga

Buenos Aires. - El cuñado de María Marta García Belsunce, Guillermo Bártoli, fue procesado ayer por falsedad ideológica en la causa que investiga supuestas irregularidades en la confección del certificado de defunción de la socióloga. La resolución es de la Cámara del Crimen, que anuló la falta de mérito dictada a favor de Bártoli por el juez Julio Lucini.

La noticia se conoció sólo 24 horas después de que el fiscal de Pilar, Diego Molina Pico, rompió el silencio para afirmar que la investigación del crimen de María Marta está "parada" por culpa del propio sistema judicial, que no le permitió aún llevar adelante una serie de extracciones de sangre para saber a quién corresponde el material genético que se halló en la escena del crimen.

En esa lista de sospechosos que deberían sacarse sangre está Bártoli, que es esposo de la hermanastra de María Marta, Irene Hurtig, y dueño de la casa donde el viudo y acusado del homicidio, Carlos Carrascosa, dijo haber estado a la hora en que la víctima era asesinada, la tarde del 27 de octubre del año pasado.

Molina Pico reveló el jueves que su intención era avanzar en las sospechas que involucrarían a Bártoli como presunto coautor del crimen ya que -dijo- "hay muchas cosas que no cierran" en su testimonio.

Bártoli fue el encargado de convocar a la cochería para que inhumara el cadáver de María Marta, con el claro objetivo -según el fiscal- de que no se hiciera autopsia ni se convocara a la policía. Su firma apareció en el certificado de defunción que establece que María Marta murió de un paro cardiorrespiratorio en la Capital Federal, detalle que podía facilitar su entierro en el cementerio de La Recoleta.

A fines de diciembre pasado, Bártoli estuvo varias horas preso junto a un grupo de empleados de la cochería Sierra, encargada del velatorio. Sin embargo, tras analizar el caso, el juez Lucini resolvió procesar por falsedad ideológica de instrumento público al médico que firmó el certificado de defunción, Juan Carlos March, y al funcionario de casa Sierra Oscar Sierco, pero dictó la falta de mérito para los otros nueve imputados, entre ellos el propio Bártoli.

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