| miércoles, 15 de octubre de 2003 | Operativo con 1.500 efectivos Las autoridades policiales darán a conocer hoy los detalles del dispositivo El dispositivo de seguridad que se va a implementar para el clásico de la ciudad es un tema de vital importancia por estas horas debido a la significación que adquiere con las circunstancias actuales, y por tal motivo las autoridades decidieron asignar a esta tarea a 1.500 efectivos.
Durante la tarde de ayer, el comisario inspector Jorge Alberto Haro, jefe de la División Operaciones, estuvo reunido con el responsable de la entidad a cargo de la seguridad en los espectáculos deportivos de la Nación, Javier Castrilli, con quien ultimaron los detalles del megaoperativo.
Desde la división Operaciones confirmaron que hoy se darán a conocer esas especificaciones con el objetivo de que toda la ciudad conozca la manera en que se debe conducir para poder asistir con tranquilidad a la máxima cita del fútbol local.
Atento a la magnitud del choque del domingo, la policía decidió asignar 1.500 efectivos para asegurar que todo transcurra por los carriles de la normalidad y no dejar lugar para que se focalicen hechos de violencia que atenten contra la integridad de aquellos que quieren disfrutar de una tarde de sana rivalidad futbolera.
El deporte más popular en nuestro país vive momentos de extrema tensión en relación al tema seguridad y los encargados de dar las garantías pretenden evitar ser el centro de futuros comentarios que hagan peligrar su labor.
Un torneo jaqueado La reciente suspensión del torneo Apertura, la dimensión que adquirió la figura del juez Mariano Bergés y sus controvertidas resoluciones, los jugadores y entrenadores citados a declarar en estrados judiciales que le resultan inevitablemente ajenos y el cambio de rigurosidad en las penas para aquellos que violan las reglas, hacen descarrilar el habitual transitar del fútbol doméstico por un costado que hubiese preferido evitar.
Más allá de eso, esta es la realidad que acompaña el actual campeonato. Mezcla caótica de exitismo deportivo y sinrazón existencial. Un clima enrarecido y espeso que ataca las buenas y viejas costumbres. Por eso, las autoridades de la Unidad Regional II no quieren dejar margen para el error, para que el próximo clásico se transforme a la postre en otro recuerdo grato dentro del folclore del fútbol de la ciudad. enviar nota por e-mail | | |