Provocan un embarazo con técnica similar a la clonación

Engendraron 3 fetos que murieron antes de cumplir los 5 meses pero confían en mejorar el método

Un equipo de investigadores estadounidenses y chinos provocó un embarazo de trillizos creados mediante una variante de la técnica que engendró a Dolly, pero que no produce clones verdaderos. A pesar de que los tres fetos murieron antes de cumplir los cinco meses, los autores de la experiencia se muestran esperanzados ante el futuro del método como un tratamiento para ciertos tipos de infertilidad.

La técnica para obtener los embriones es la transferencia nuclear: para crear a la famosa oveja Dolly, el procedimiento consistió en extraer el núcleo de una célula adulta -en este caso de una oveja- e insertarlo en el óvulo de otro animal al que previamente se le había extraído este orgánulo celular.

A partir de este material, se estimula la formación del embrión y el feto resultante tiene la misma configuración genética que el individuo que cedió la célula adulta y una pequeña parte de ADN procedente del óvulo.

La variante empleada por el equipo de James Grifo de la Universidad de Nueva York y los investigadores de la Universidad Médica Sun Yat-Sen, en China, parte de un cigoto obtenido por la fecundación de un óvulo de la madre con esperma del padre.

Tras este proceso, en el cigoto se forman dos pronúcleos que fueron los que los científicos extrajeron e insertaron en el óvulo de una donante a la que previamente se había quitado su propio núcleo. Luego de un período de crecimiento en el laboratorio, los embriones resultantes se implantaron en el útero de la madre: éstos tienen una configuración genética propia resultado de la unión de cromosomas paternos y maternos y una pequeña parte de la mujer que ha donado el óvulo.

Los experimentos, llevados a cabo en China -porque en Estados Unidos está prohibido este tipo de prácticas-, se realizaron con cinco mujeres, pero sólo una quedó embarazada.

De los cinco embriones implantados sólo tres se asentaron en la mucosa uterina y siguieron su desarrollo de una forma aparentemente normal, pero al cabo de algo más de cuatro meses los tres fetos habían muerto por diferentes razones. (Télam)