| lunes, 13 de octubre de 2003 | Cerca pero lejos Tiro casi lo gana pero sigue en deuda Rodolfo Parody / Ovación A Tiro se le escapó sobre el final. Ya saboreaba la victoria pero no pudo ser. De todos modos, el empate en dos goles se ajusta a lo ocurrido. Porque los tigres de Ludueña se estaban llevando mucho más de lo que habían merecido. En las manos de Misetich y en el despliegue de Marinelli se sustentó una igualdad que bien podría haber sido derrota.
Pocas ideas y escasas emociones fueron el denominador común de un primer tiempo en el que Antoniana tuvo mayor decisión y ejerció un leve predominio a partir del control en la zona de gestación. Tiro pareció quebrado y en el flojo desempeño de sus volantes estuvo la causa de las escasas llegadas que dispuso.
Fue Misetich el gran responsable de evitar la caída a los 17 minutos, al tapar un cabezazo de Medina. El mismo ex delantero charrúa recogió el rebote y el "uno" tirolense, en gran reacción cuando parecía vencido, desvió con una mano por encima del travesaño.
Pero el gol estaba al caer y el conjunto salteño se puso en ventaja a los 25', luego de que Agotegaray pusiera un pase preciso a espaldas de los defensores para Lovera, quien metió el centro que encontró en absoluta soledad al Tele Medina. Y su cabezazo abajo venció la resistencia de Misetich.
La conquista no despertó a Tiro. Todo lo contrario. Juventud Antoniana se aproximó aún más y pudo haber aumentado el marcador. Apenas algunos destellos del Chueco García encendían la ilusión de emparejar el trámite. Pero estaba demasiado solo y el equipo de Teglia se repetía en los centros que buscaban la cabeza de Guerra, argumento que, de tan repetitivo, resultó hasta allí intrascendente.
Una reacción impensada Salta (enviado especial).- Pero antes de que la ansiedad se apoderara de los hombres de Ludueña, el Colorado Vacaría sacó provecho de toda la experiencia de Guerra, quien se llevó a la rastra a tres defensores y le peinó el balón para que en soledad la metiera junto al travesaño. Había sido la primera aproximación clara de los rosarinos. Y en la segunda golpeó a fondo. Chitzoff ejecutó un tiro libre y Marinelli de cabeza la puso de emboquillada en el segundo palo, en medio de la sorpresa de todo el estadio.
Antoniana fue pura impotencia. Comenzó a chocar contra la segura zaga central del conjunto de Teglia, que se encargó de despejar toda pelota dividida. Apenas se quedó relamiendo el gol con un tiro cruzado de Albornoz que el eficiente Misetich desvió.
Con la prodigalidad de Marinelli, Tiro Federal se estaba llevando una victoria que en este primer segmento del torneo le resultaba esquiva, hasta que llegó el último minuto fatal. Un centro desde la izquierda lo encontró a Cerutti en el medio del área y con una media vuelta la introdujo abajo para sellar la justicia.
Pese a que Tiro pretendía quebrar la racha sin triunfos, la actuación poco convincente de ayer hace que el empate tenga singular valor, más allá del gol agónico de los salteños. Aunque su fútbol quedó en deuda. enviar nota por e-mail | | Fotos | | Marinelli, autor del segundo gol, va al piso. | | |