El conflicto en Bolivia sumó otros cinco muertos

La Paz. - El ejército boliviano enfrentó a manifestantes en la ciudad de El Alto, contigua a La Paz, durante nuevos y violentos disturbios que habrían provocado al menos cinco muertos según medios de prensa en contacto con los huelguistas. Esporádicos tiroteos se escucharon desde el amanecer en los accesos de esa urbe, de 800.000 habitantes y que es parte de la zona metropolitana de La Paz, después de que el gobierno resolvió declararla "zona militar" para frenar los graves enfrentamientos y disturbios que provocaron el sábado otras dos muertes y dos decenas de heridos.

El Alto, una de las urbes de más bajos ingresos de Bolivia, está habitada en su gran mayoría por indígenas provenientes del empobrecido sector rural. El gobierno denunció que líderes opositores, encabezados por el diputado indígena y jefe cocalero Evo Morales, se embarcaron en un proceso sedicioso con el propósito de desencadenar un golpe de Estado. Morales y otros líderes gremiales se declararon ayer "en la clandestinidad", ya que según ellos, el gobierno buscaría asesinarlos. Habitantes de El Alto denunciaron a radios que soldados apoyados por unidades blindadas dispararon armas de guerra contra civiles reunidos en la venida Ballivián y provocaron la muerte del trabajador José Pérez Cortés, de 31 años, y heridas de bala a otras tres personas, según narraron a la red Erbol. Otra denuncia de testigos, difundida por la misma cadena, sostuvo que un segundo civil pereció en un operativo simultáneo que dejó también cinco heridos.

Posteriormente, un reportero de la emisora Fides, de la Iglesia Católica, relató desde 15 kilómetros de El Alto, la muerte de tres personas durante enfrentamientos con militares que escoltaban un convoy de vehículos cisterna que transportaban nafta desde una refinería rumbo a La Paz. La caravana intentaba desde el sábado desplazarse hacia El Alto y La Paz para resolver la escasez de combustible y gas para uso doméstico en las dos ciudades, provocada por los bloqueos de ruta. Los campesinos exigen la renuncia del presidente Gonzalo Sánchez de Lozada y la renuncia al proyecto de exportar gas natural por Chile. El país ya lleva cuatro semanas de protestas , bloqueos de rutas circundantes a La Paz y enfrentamientos.

La entrada de El Alto quedó en control militar.