Actúa en la nueva película de Gustavo Postiglione

Jazmín Stuart: "Puedo interpretar a alguien sexy pero es un trabajo que me agota"

La actriz contó que busca un perfil más cercano al cine y deja en segundo lugar la exposición mediática

Fernando Toloza / La Capital

Jazmín Stuart se sumará mañana al elenco de "Tremendo amanecer", la película de vampiros que Gustavo Postiglione está filmando en Rosario con Gabriel Goity, el rockero Coki Debernardi y los actores Raúl Calandra y Natalia Leggio, entre otros. Stuart debutó en televisión en "Verano del 98" casi sin quererlo. Su primera intención era hacer cine, y para ello estudió en la Universidad del Cine de Manuel Antín, pero estudiando actuación con Julio Chávez se tentó y la pantalla chica la aceptó de inmediato, hasta llegar, por ejemplo, a "Son amores", uno de los mayores éxitos de la TV. Sin embargo, Stuart no olvida su pasión por el cine.

Por estos días se estrenará "Ciudad del sol", su debut en la pantalla grande a las órdenes de Carlos Galletini, y llegará a Rosario para su segundo papel en cine en el filme de Gustavo Postiglione, el director de "El asadito" y "El cumple", entre otras.

-¿Qué te decidió a actuar en una película de Gustavo Postiglione y en Rosario?

-Me gustaron mucho las películas suyas que vi y me parece que esta película que está haciendo va a ser algo muy interesante. Además de que me gustó el guión, después de leerlo tuve una charla con él en la que se perfiló bastante qué clase de filme sería.

-¿Qué necesitás saber como actriz para crear un personaje?

-Para la película de Postiglione estoy mirando mucho cine del expresionismo alemán porque en el filme hay bastante de eso, entonces quiero ver cómo se manejan y buscar los gestos porque el personaje está un poco teñido del expresionismo.

-¿Te gusta el género de vampiros o el fantástico?

-Sí, la verdad es que me gusta, pero lo me que atrajo también de esta película es la vuelta, el giro realista que tiene, donde creo que se verá una realidad muy cercana, que en general no está en una película fantástica.

-¿Qué sentís con respecto a "Ciudad del sol", filmada hace tanto?

-Siento que, como primera experiencia, es válida. Es un protagónico y fue un papel muy comprometido. Cuando lo veo, pienso que hoy lo haría de manera bastante diferente, pero fue una gran experiencia porque, en realidad, yo quería empezar haciendo cine, y ni siquiera como actriz, sino detrás de la cámara, y por eso estudié dirección.

-¿Y como diste el paso hacia la actuación en televisión?

-A los 12 años estudié actuación con Hugo Midón, porque me interesaba ese mundo, después seguí con Cristina Banegas y Augusto Fernándes. Luego empecé con Julio Chávez, que es hoy mi maestro, y de verlo a él me dieron ganas de actuar. Entonces surgió la posibilidad de una prueba para "Verano del 98" y quedé. Reconozco que tenía un gran prejuicio sobre la televisión.

-¿Hoy se mantiene el prejuicio?

-No, ahora diría que tengo un juicio sobre la televisión. Se pueden hacer muchas cosas, y hay aspectos buenos y malos. Particularmente me cansa la velocidad y ciertas prioridades, que a veces no dejan lugar para profundizar.

-¿El trabajo de "Son amores" te expuso más?

-No lo sé, en general suelo tener un perfil bajo. Hay cosas que me gustan de la televisión y otras que no. "Son amores" te da muchas posibilidades creativas y eso se disfruta.

-¿Cómo te llevás con el papel de mujer sexy, que a primera vista algunos pueden adjudicarte?

-Me agota actuar de sexy, es un personaje que me cuesta hacer, puedo hacerlo pero me deja cansada. Y, por supuesto, no tiene mucho que ver conmigo. A veces te prestás a eso porque es parte de la actuación, pero en mi caso no es más que eso, un papel que a veces hice porque me lo pedía el programa.

-Algunas revistas te han presentado como una actriz sexy y ni hablar de Internet.

-Me parece que cuando sos una actriz joven los medios te transforman en una mujer fatal. Es un artilugio muy usado y se ve que es un buen negocio. Está en cada uno prestarse a eso; yo a veces he cometido el error de ceder, y otras he tenido la lucidez de decir que no.

-¿En "Verano del 98" se explotaba más el aspecto misterioso que el sex appeal?

-Puede ser. "Verano del 98" fue increíble porque pasó de todo, desde el realismo hasta lo fantástico en tres años. Lo disfruté mucho porque lo hice con toda la ingenuidad. En la distancia me gusta, porque gozaba con todo lo nuevo que tenía la televisión para mí. Después esa magia se va perdiendo, aunque siempre depende del programa.

-Estaban vos, Dolores Fonzi y otros con sus primero papeles, ¿fue un semillero?

-También estaban Tomás Fonzi, Romina Ricci... y sí, creo que fue un semillero, después del cual cada uno encontró su perfil, se acomodó a lo que más le interesaba.

-¿El hecho de haber estudiado para directora de cine en la Universidad del Cine hace que mires críticamente a los directores cuando actúas?

-Con el tiempo aprendí a situarme en mi rol de actriz y a dejar para cuando corresponda la mirada de directora, pero más de una vez me quería surgir la directora. Ahora está claro que no tengo que mezclar los roles.

-¿Cuándo vas a dar el paso a la dirección?

-No sé, por ahora seguiré actuando y creo que lo primero será dirigir una obra de teatro que estoy escribiendo. Eso me parece necesario antes de embarcarme en el cine.

La actriz comenzó en " Verano del 98".