| miércoles, 24 de septiembre de 2003 | Día Mundial del Corazón Una vuelta de tuerca en cirugía cardiovascular Ahora los adelantos técnicos permiten las operaciones con el órgano latiendo La cirugía cardíaca ocupa un lugar destacado en el tratamiento de las enfermedades cardiovasculares. Los nuevos procedimientos lograron bajar la la morbimortalidad y disminuir los riesgos. Uno de los últimos avances en la materia son las cirugías a "corazón latiendo", sin bombas de circulación extracorpórea. Con estos adelantos tecnológicos es posible inmovilizar el sector del corazón que debe ser intervenido, mientras el resto continúa bombeando sangre. "Los beneficiados son los pacientes", explicó Víctor Mario Caramutti, cirujano cardiovascular que, luego de trabajar 28 años con el doctor René Favaloro, viene periódicamente al Instituto Cardiovascular de Rosario.
"Los pacientes logran una mejor calidad de vida y además se retrasan las reoperaciones, porque es frecuente volver a intervenir a quienes fueron operados hace 25 años o más".
Sin bombeo exterior Actualmente en Estados Unidos, 9 millones de personas superan los 80 años de vida y se calcula que para el 2050 habrá entre 25 y 30 millones de octogenarios. El aumento de la expectativa de vida implica un desafío para la ciencia cardíaca, que pronto deberá ofrecer alternativas a poblaciones de alto riesgo.
Los pacientes de más de 80 años presentan patologías asociadas como afecciones respiratorias, renales o vasculopatías asociadas. En ellos la cirugía cardíaca es más riesgosa. Las técnicas que permiten operar a corazón latiendo disminuyen los riesgos. "Se opera sin la necesidad de emplear una bomba de circulación extracorpórea, es decir con corazón latiendo", amplió el especialista. Esta bomba, que era hasta hace pocos años el instrumento más utilizado para las cirugías de bypass, permite que la sangre fluya mientras el corazón está detenido durante la cirugía. Al mismo tiempo colabora con el cirujano, que requiere cierta inmovilidad del corazón para hacer su trabajo.
Los avances permiten inmovilizar la región del corazón que necesita ser mejorado sin por ello alterar la presión ni el ritmo cardíaco. De esta manera el paciente no debe ser sometido a la circulación extracorpórea, ni utilizar un corazón y un pulmón artificial. También evita riesgos como el accidente cerebrovascular (ACV) que en enfermos de edad avanzada produce considerables deterioros.
Caramutti afirmó que los resultados de la aplicación de esta técnica, que se utiliza sólo para cardiopatías isquémicas, "son plenamente satisfactorios, disminuyen el consumo de sangre y son menos las complicaciones posquirúrgicas". La técnica no toca los grandes vasos, lo que puede producir alguna rotura aórtica y con ello el cerebro puede sufrir un ACV.
Las intervenciones "a corazón latiendo" son recomendadas especialmente en personas mayores. También se puede utilizar en pacientes jóvenes, pero "tal vez ofrezca menos beneficios que la cirugía cardiovascular estándar con la utilización de circulación extracorpórea", aclaró Caramutti.
Además de estas técnicas, el profesional comentó que hoy la tendencia se orienta a la realización de la cirugía coronaria con la utilización de bypass arterial. "Antes se hacía con la vena safena, pero actualmente se usa la arteria mamaria o la radial. Esto otorga una mayor duración al bypass, lo cual es de suma importancia para la sobrevida del paciente. Esto, disminuye la incidencia de eventos coronarios a largo plazo", concluyó Caramutti. enviar nota por e-mail | | |