| miércoles, 24 de septiembre de 2003 | Otro militar de EEUU fue acusado de espionaje en la base de Guantánamo Trabajaba como traductor de prisioneros de guerra. Hace tres días se anunció el arresto de un capellán Washington. - Un militar estadounidense, traductor en la base de Guantánamo en Cuba donde se encuentran prisioneros de guerra en Afganistán pertenecientes a la red terrorista Al Qaeda, fue acusado de espionaje y de ayudar al enemigo, en el segundo caso de este tipo tras el arresto de un capellán musulmán. El militar, Ahmad I Al Halabi, fue arrestado el 23 de julio y está detenido desde entonces en la base de la fuerza aérea estadounidense en Vandenberg, California, indicó ayer un funcionario de Defensa estadounidense.
Al Halabi fue acusado de espionaje, de ayudar al enemigo, de no acatar una orden, de fraude bancario y de perjurio, precisó el comandante Michael Shavers. El anuncio de su detención ocurre tres días después del arresto de un capellán musulmán también afectado a Guantánamo, el capitán James Yee. El portavoz no indicó si podía existir algún vínculo entre ambos. La única relación entre ellos es que "se encontraban en Guantánamo más o menos en las mismas fechas", dijo.
Ambos fueron interceptados por agentes del FBI (policía federal) mientras bajaban de un avión fletado por el ejército, que provenía de Guantánamo, en la base aérea de la armada de Jacksonville (Florida, sureste).
Secreto de defensa El portavoz del Pentágono no comunicó ninguna precisión sobre las acusaciones en contra de Al Halabi, pero éstas sugieren que habría supuestamente entregado informaciones clasificadas. No confirmó las informaciones según las cuales esos datos fueron descubiertos en su computadora portátil.
Los policías también confiscaron varios documentos clasificados como "secreto de defensa" cuando arrestaron al capitán Yee, de 35 años, según publicaron varios medios de prensa. Entre estos documentos, figuraba un plano detallado de la base de Guantánamo.
Unas 660 personas, originarias de 42 países, la mayoría de ellas capturadas en Afganistán en el marco de la lucha antiterrorista liderada por EEUU, se encuentran detenidas en la actualidad en la base de Guantánamo, enclave militar bajo control estadounidense al sureste de Cuba. El gobierno de Bush no otorgó a estos presos el estatuto de prisioneros de guerra respaldados por la Convención de Ginebra, sin acceso a abogados.
El secretario de Defensa, Donald Rumsfeld, dio a entender que las detenciones continuarían mientras dure "la guerra contra el terrorismo". Los militares prometieron procesos bajo jurisdicción militar, sin jurado, establecida para esta ocasión por el Pentágono y el Departamento de Justicia.
El capitán Yee, de origen chino, había sido enviado a Guantánamo en noviembre pasado para cumplir la función de capellán de los detenidos, pero también de consejero religioso del comando estadounidense. Diplomado de la academia militar de West Point, Yee recibió formación religiosa en Siria. Tras los atentados del 11 de septiembre de 2001, defendió públicamente los preceptos no violentos del Islam. (AFP) enviar nota por e-mail | | Fotos | | La base de Guantánamo en Cuba. | | |