| miércoles, 24 de septiembre de 2003 | Siguen buscando a los jóvenes náufragos La Prefectura Naval Rosario continuará hoy con los operativos de rastrillaje y búsqueda de los cuatro jóvenes que el domingo pasado desaparecieron en las aguas del Paraná. Al cierre de esta edición seguían las tareas en la zona del accidente y en las cercanías de la desembocadura del arroyo Saladillo sin que se pudiera dar con los cuerpos de los muchachos.
"No tenemos respuesta y cada vez estamos más desesperados", dijo Claudio, el padre de Ignacio Vecchiarelli, un muchacho de 21 años que desapareció en el río el domingo pasado, poco después de las 20, cuando el bote en el que se trasladaba junto con otras 22 personas diera una vuelta de campana. Amigos de Ignacio se sumaron a la búsqueda en la zona de Villa Gobernador Gálvez. "No vamos a parar hasta que aparezca", comentaron.
En ese accidente también desaparecieron otros tres muchachos, identificados como Eduardo Soria (23), Roberto Arriola (16) y Leonardo Distéfano (25).
El correr de las horas no disminuye el dolor de los que fueron protagonistas del hecho. Leonardo Núñez tiene 18 años y definió a la noche del domingo como la "más horrible" de toda su vida. El, junto con otros amigos, logró sobrevivir luego de nadar "un buen rato". El muchacho, al que todavía le cuesta mucho hablar de esta tragedia, contó que "la canoa se hundió y hubo que empezar a nadar para no morir ahogado". Después de mucho esfuerzo logró salir "en la zona del puerto, más allá de Uriburu", indicó.
Otro de los que sigue conmocionado por la desgracia ocurrida el Día de la Primavera es Héctor Antonio Caruso. Este muchacho de 21 años habría sido el tripulante de la embarcación "La Cabezona", que zozobró como consecuencia de la sobrecarga de pasajeros. La canoa sería propiedad del padre de Caruso y el muchacho habría sacado la lancha para ir a la isla con sus amigos.
El bote tiene capacidad para ocho personas y según relataron las víctimas del accidente, eran 23 los que subieron a la canoa, que primero comenzó a hundirse y luego dio una vuelta de campana.
Prefectura Naval Rosario intensificó las tareas de búsqueda. A los dos buzos tácticos que trabajaron desde el inicio, ayer se sumaron otros cuatro especialistas del Servicio de Salvamento, Incendio y Protección Ambiental de Buenos Aires. En total son seis los buzos que buscan a los jóvenes bajo las aguas.
También se realizaron patrullajes con tres guardacostas de Rosario, uno de Arroyo Seco y una moto de agua.
Al cierre de esta edición todavía no se había hallado a los desaparecidos y las autoridades locales de la Prefectura confirmaron que continuarían las tareas en horas de la noche. enviar nota por e-mail | | |