El gobernador celebró recibir una "legitimidad mayor" de los ciudadanos

Solá obtuvo un triunfo aplastante en su reelección en provincia de Buenos Aires

El mandatario renovó sus apoyos a Duhalde y Kirchner y negó que piense en las presidenciales del 2007

Tras obtener un aplastante triunfo en las elecciones bonaerenses, el gobernador Felipe Solá, ahora con un nuevo período de gobierno a partir del próximo 10 de diciembre, admitió anoche su "alegría" por haber logrado "una legitimación mayor" y compartió su victoria con el presidente Néstor Kirchner y el líder del justicialismo bonaerense, Eduardo Duhalde. "Ahora quiero ver a la provincia transformarse de nuevo en la locomotora del crecimiento del país, y con eso, nos damos por bien pagados", sintetizó al referirse a su proyecto para el nuevo período que afrontará.

Definió además que el resultado electoral demuestra que "el proyecto político más exitoso de la democracia es el peronismo bonaerense".

Escrutadas 8.878 mesas de las 26.834, Solá obtenía 778.890 votos (44,66%) y le seguía la radical Margarita Stolbizer con 252.982 (14,50), Luis Patti (Acción Federalista por Buenos Aires) 174.612 (10,01) y Aldo Rico (Frente Popular Bonaerense) con 163.019 sufragios (9,35 %).

Con esos resultados a la vista, el gobernador reelecto ratificó su "compromiso con el presidente Kirchner" con quien, prometió, "vamos a sacar al país adelante".

No obvió mencionar a su principal mentor, el ex presidente y ex gobernador Eduardo Duhalde, al afirmar que "de él también es el triunfo de hoy y estoy seguro que así lo siente".

A poco más de una hora del cierre de los comicios en la provincia, Solá salió a hablar en la sede de la Gobernación, en La Plata, antes de partir hacia la Capital Federal, donde siguió de cerca el desarrollo del escrutinio.

Dijo sentirse ya seguro de su "triunfo rotundo" y se mostró convencido en que la lista de diputados también tendrá una performance similar a la de él, con lo que se incorporarían una veintena de diputados justicialistas bonaerenses al Congreso nacional para que se sumen, aseguró, al respaldo al proyecto de Kirchner.

También anticipó que el justicialismo "recuperó varios intendentes", como los de "Avellaneda, Quilmes, Tandil y San Nicolás". En total fueron 14 los municipios que volvieron a manos del peronismo.

El gobernador no quiso anticipar cambios en su gabinete, y ratificó que no utilizará su triunfo como "un trampolín a la Presidencia en el 2007".

"El 27 de abril votamos a un presidente que tiene cuatro años y medio por delante, y haremos todo lo posible para fortalecerlo", dijo.

También reconoció que su victoria electoral le hace sentir "una mayor responsabilidad y una legitimación mayor, por supuesto que la vamos a sentir, y es parte de nuestra alegría".

Aludió así Solá al hecho de que en su ex condición de vicegobernador, tuvo que hacerse cargo del Poder Ejecutivo provincial en diciembre de 1999 cuando el entonces gobernador, Carlos Ruckauf -hoy integrante de la lista triunfante a diputados- dejó el cargo para asumir la Cancillería en la presidencia de Duhalde.

Solá prefirió, en sus primeras declaraciones tras el cierre de los comicios, no reiterar críticas a su antecesor, y se limitó a señalar que Ruckauf le dejó la Gobernación "en la situación difícil en la que estaba el país".

"Ahora ya no soy bombero, me saco el traje para a partir de este momento ponerme el overol", graficó, en alusión a anteriores expresiones suyas en las que había señalado que Ruckauf le había dejado "una provincia en llamas".

Ingeniero agrónomo, Solá, de 53 años, siempre estuvo vinculado al campo y ello le valió ocupar diversos cargos provinciales y nacionales.

Solá flanqueado por Chiche Duhalde y Giannettasio.