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 lunes, 15 de septiembre de 2003

El radical Nikisch se imponía en el Chaco por once puntos sobre el PJ
La elección de diputado nacional era muy pareja y de las tres bancas en juego faltaba definir una

El candidato oficialista a gobernador del Chaco, el radical Roy Nikisch, sacaba anoche una ventaja de alrededor de ocho puntos sobre el peronista Jorge Capitanich, en una elección polarizada en la que la tendencia era inversa para diputados nacionales, ya que el PJ ganaba en ese rubro.

Cuando se habían escrutado 883 de un total de 1.587 mesas (55,63 por ciento), la Alianza Frente de Todos, que postuló a Nikisch y Eduardo Moro, obtenía 138.433 votos (52,68), mientras la fórmula del Frente para la Victoria, de Capitanich y Rafael González, 108.948 sufragios (41,46).

En tercer lugar, aparecía el ARI, que candidateó a Juan Carlos Mañanes y Carlos Orce, con 5.771 votos (2,20). Después venía el voto en blanco con 3.858 preferencias (1,44 por ciento).

En el rubro de diputados nacionales la pelea era voto. El Frente de Todos obtenía 107.618 votos (43,48%) y el Frente para la Victoria lograba 106.785 (43,15), cuando aún restaba escrutar el 45 por ciento de las mesas.

Si estas cifras se reflejan en los resultados finales, a la Cámara de Diputados de la Nación irían el justicialista José Ricardo Mongeló y por el lado de la alianza ingresaría Víctor Zimmermann, actual secretario de Desarrollo Social de Angel Rozas. El tercer escaño estaba en discusión.

Asimismo, si la tendencia al nivel Gobernación los chaqueños evitarían ir a un ballottage, ya que el ganador lograría superar el 45 por ciento de los sufragios que establece la Constitución.

Sea cual fuere el resultado final, el justicialismo hizo en Chaco una muy buena elección, en una provincia donde hace 16 años que no gobierna.

El PJ pudo unirse para enfrentar estos comicios con posibilidades ciertas de ganar la gobernación al radicalismo, que controla el Ejecutivo desde hace ocho años, a través del actual presidente de esa centenaria fuerza, Angel Rozas.

En su dura carrera, Capitanich, ex jefe de Gabinete de Eduardo Duhalde, contó con el respaldo expreso del presidente Néstor Kirchner, quien lo recibió recientemente en la Casa Rosada, aunque no visitó el Chaco durante la campaña.

Pero aunque el radicalismo lograra retener la gobernación a través de Nikisch, actual vicegobernador, sufriría una dura derrota en el interior ya que, según admitieron dirigentes oficialistas, perdieron 18 importantes intendencias que controlaban hasta ahora, entre ellas la de Tres Isletas, la localidad de donde es oriundo su candidato a gobernador.


El juarismo, en caída libre
En otro orden, el radicalismo se imponía con el 64 por ciento de los votos en las elecciones en la capital santiagueña y consagraba intendente a Gerardo Zamora, que hace 18 meses sucedió en el cargo a José Zavalía, que renunció envuelto en una grave crisis social y económica del municipio.

El PJ, liderado por Carlos Juárez, caudillo peronista y abogado de 87 años, sufría una notable derrota y sus candidatos a intendentes y concejales apenas lograban el 20 por ciento de los sufragios.

Traspié contrario al de los comicios del año pasado, cuando con el 62 por ciento de los votos, el Partido Justicialista consagró vicegobernadora a Mercedes Aragonés, esposa de Juárez, que más tarde alcanzó la primera magistratura provincial tras la renuncia de Carlos Díaz, envuelto en un escándalo judicial y policial.

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