Mañana reconstruirán el crimen de Pocho Lepratti

La Justicia reconstruirá hoy cómo fue el homicidio de Claudio Lepratti, el militante social que murió baleado por un policía el 20 de diciembre de 2001 en una escuela del barrio Las Flores. La reconstrucción se hará a las 16 y participarán el acusado y varios testigos, entre ellos los dos policías que lo acompañaban en un patrullero cuando se produjo el crimen.

La medida procesal fue ordenada por el juez Ernesto Genesio, quien lleva adelante el juicio contra Esteban Ernesto Velázquez. Se trata de un agente de la policía que trabajaba en el Comando Radioléctrico de Arroyo Seco y el día del hecho patrullaba la zona sur de la ciudad por la ola de saqueos que se estaban produciendo.

Lepratti estaba en la terraza de la escuela 756 de Las Flores cuando recibió un tiro en la garganta y murió casi en el acto. El disparo provino de un patrullero que pasó de contramano frente al edificio, y que estaba ocupado por tres efectivos. Entre ellos iba Velázquez, quien estaba sentado en la parte trasera del vehículo.

La reconstrucción fue solicitada por el abogado de Velázquez, Horacio Corvacho. El defensor sostiene que hay contradicciones entre los testigos que involucran al policía y cree que esta medida puede dejarlas al desnudo. Sin embargo, los abogados que patrocinan a los familiares de Lepratti como actores civiles, Federico Garat y Carmen Maidagan, sostienen que las pruebas involucran claramente al policía.

La medida que se hará hoy se desarrollará en el escenario del homicidio, que será custodiado por unos 30 efectivos de la Gendarmería Nacional. Participarán de ella el juez Genesio y su secretario, Ernesto Eiris; la fiscal Elida Rivoira y peritos de la policía científica de la Gendarmería.

La reconstrucción comenzará a las 16 y los alumnos de la escuela 756 del turno tarde no tendrán clases. Los expertos de la policía científica sacarán fotos y harán pericias de scopometría, planimetría y balística. Uno de los objetivos de la medida es dilucidar el lugar exacto donde estaban la víctima y el victimario, y también algunos de los testigos.

Lepratti era entrerriano, había nacido en Concepción del Uruguay y vivía en Rosario hace años. Tenía 38, daba clases de filosofía y teología en la escuela de la parroquia del cura Edgardo Montaldo y colaboraba en el comedor de la escuela 756. Allí había estado trabajando hasta un rato antes de que le dispararan el escopetazo con posta de plomo que le segó la vida.