Estilistas: textura óptima

Cuando decimos que un cabello tiene textura es porque luce óptimo. Esa condición se consigue encontrando el punto justo de equilibrio para que ya sea fino o grueso, pueda obtenerse de él lo mejor.

A modo de ejemplo si se trata de un cabello fino habrá que incrementar su volumen y consistencia. Si en cambio es grueso se buscará disminuir esa intensidad que lo hace pesado.

Todo está en el conocimiento y la capacidad del estilista para saber descubrir las posibilidades reales de cada cabello. El corte es fundamental, ya sea con tijera de pulir o desmechando por zonas. Así se consigue el efecto deseado por el profesional.

La coloración da también mayor cuerpo y lozanía. Afirma el cabello y define su estilo. Las emulsiones logran efectos similares. Los reflejos o mechas dan una menor textura que las anteriores, aunque son igualmente aconsejables.

La consulta con el estilista de confianza es importante para optar luego por el mejor método para lograr la buscada textura.

Carlos Melo