Trágico tifón en Corea

Fuertes vientos dejan 58 muertos y 27 desaparecidos

El tifón Maemi, el más potente del que se tengan registros en Corea del Sur, arrasó anteanoche la costa sur del país con vientos de hasta 216 kilómetros por hora y lluvias torrenciales, dejando una profunda huella de devastación y al menos 58 muertos y 27 desaparecidos, según informes oficiales.

A su paso el tifón provocó inundaciones y deslizamientos de tierra, soterró viviendas, generó cortes de energía y de las comunicaciones, derribó árboles y enormes grúas de construcción e hizo estragos en el mar.

Las autoridades de prevención de catástrofes informaron anoche que al menos 58 personas murieron y por lo menos 27 seguían desaparecidas. Las autoridades temen que el número de muertos aumente cuando se restablezcan las comunicaciones con las numerosas áreas alejadas aisladas por la tormenta. Reportes televisivos calculan que más de 100 personas pueden haber muerto como consecuencia del paso de Maemi (Cigarra en coreano).

Toda la fuerza del tifón golpeó la península coreana ayer por la tarde, antes de seguir rumbo al Mar del Japón. Mientras el Maemi perdía fuerza para convertirse en depresión tropical continuaron las fuertes lluvias, inundando calles y campos.

La mayoría de las víctimas murió ahogada, sepultada por deslizamientos de tierra o electrocutada por caída de cables eléctricos u otros accidentes. En la colisión de un pesquero con un petrolero ante las costas de la provincia de Kyongsang del Sur murieron al menos 15 personas.

Cinco plantas de energía atómica en la costa sur tuvieron que ser desconectadas temporalmente por perturbaciones en los cables eléctricos.

En las instalaciones portuarias en la populosa ciudad de Busan, en la costa sur del país, el viento doblegó gigantescas grúas, una de las cuales hirió al caer a cuatro bomberos. El viento también tumbó sobre el muelle a un barco que había sido convertido en un hotel flotante. (DPA)

Un barco volcado sobre el muelle en Busan.