El ministro de Educación sigue adelante con el ajuste de los subsidios

Germano: "Obeid no podrá retroceder en la política hacia los colegios privados"

Advirtió que para dar marcha atrás con lo actuado "van a tener que cambiar la ley"

Eugenia Langone / La Capital

A menos de tres meses de finalizar su gestión, el ministro de Educación santafesino, Daniel Germano, asegura que va a seguir adelante con el ordenamiento del servicio de enseñanza privada y cree que el próximo gobierno no podrá retroceder sobre lo avanzado. "El cumplimiento de la ley es uno, no se puede dar marcha atrás. Si quieren hacerlo, van a tener que cambiar la ley", argumentó. Pero en diálogo con La Capital también prometió abrir otro frente de batalla: ordenar el área de educación para adultos. "Hay escuelas sin matrícula y directores sumariados. Es un sector con serias irregularidades", reveló. Y aunque hace pocos días admitió que "los maestros están mal remunerados", volvió a asegurar que "no habrá aumento de salarios docentes porque no hay plata".

-Usted admitió el Día del Maestro que los docentes están mal remunerados, ¿habrá aumento de salarios?

-No habrá aumento, pero es cierto que están mal remunerados. Para que los docentes ganen más, el país deberá incrementar el gasto educativo del 4 por ciento del PBI (Producto Bruto Interno) al 6 por ciento, como tienen los países desarrollados. Esta es la realidad, el resto es una hipocresía. Pero además los estatales deben ser remunerados conforme a lo que hacen y no fijar políticas comparativamente inferiores, porque el Estado guarda privilegios con algunos sectores por el solo hecho de que son pocos. La verdad es que mientras no aumente la recaudación, nos vamos a llenar la boca hablando de educación y vamos a hacer discursos muy lindos, pero plata no hay.

-Usted dice que en el Estado hay grupos privilegiados que se sostienen en el tiempo...

-Basta con recorrer los diferentes regímenes laborales, ya sea registro de la propiedad, ramas del sector judicial y legislativo, y sectores del aparato de recaudación, para encontrar ejemplos de lo que digo. Entonces el problema de los docentes sería que son muchos, ésto es lo que hay que corregir.

-Usted dijo que no se puede vivir enfrentado al gremio docente; sin embargo, en lo que va de su gestión no faltaron los entredichos con los dirigentes de Amsafé, incluso en los últimos días.

-No creo que el gremio represente al docente medio. Están fuertemente ideologizados y hasta pierden el verdadero cometido para el que fueron elegidos. Y hasta se opusieron a las distinciones que entregamos el Día del Maestro para sacar a algunos docente del anonimato. En cambio, el docente medio lucha por ser reivindicado dentro de la comunidad.

-¿Dónde va a focalizar sus últimos tres meses de gestión?

-Hay un tema que para mí es una deuda: la enseñanza para adultos. Es un sector problemático, donde la matrícula ha estado escondida y donde hay que pasar el sistema en blanco sobre negro. Tenemos establecimientos para adultos tanto de nivel primario como medio que verdaderamente no existen. Hay establecimientos que no tienen alumnos o que su matrícula es bajísima. Esta es la realidad y ningún docente va a quedar en la calle, pero tenemos que reasignar funciones. Quiero dejar planteado para el 2004 el diseño curricular de enseñanza para adultos. Porque es una área desordenada y con irregularidades, desde la matrícula hasta directores sumariados, que todo el mundo conoce. Pero cuando se dicen desde el lado oficial, nos acusan de estar haciendo un ataque a los docentes. Sólo queremos arreglar algo que no está bien y vamos a intentarlo de acá a fin de año.

-¿Cuál es al día de hoy la situación en cuanto a la aplicación de la ley de subsidios a los colegios privados?

-Lo que hicimos fue ordenar a través de auditorías y fue un proceso que sorprendió porque puso en blanco y negro la situación de algunos colegios. Ahora siguen las auditorías y continuamos corrigiendo los aportes que hace el Estado. Hay 111 establecimientos que no perciben ningún aporte y quizá allí haya una injusticia. El problema es que lo que debía ser la excepción, fue la regla. Porque sobre 700 establecimientos, 600 reciben aportes y de ellos el 90 por ciento tiene un 100 por ciento de subsidio para el pago de salarios. Entonces, el sistema fue demasiado flexible o el Estado dejó de sostener la oferta pública como correspondía, ésta fue la deformación. Y acá no hay escuelas parroquiales que vayan a sufrir recortes, porque esas escuelas están por debajo de los límites de arancel.

-Pero el mismo arzobispo Eduardo Mirás intercedió ante el gobernador Carlos Reutemann...

-No voy a negar que los obispos se reunieron con el gobernador y conmigo. Es lógico que defiendan a loxs colegios confesionales, pero su preocupación fue bajando cuando se pusieron de manifiesto los verdaderos alcances de las medidas.

-¿Y cuáles fueron hasta ahora los alcances de las medidas?

-Hay siete u ocho escuelas de toda la provincia donde el aporte se reduce a cero. En otras, baja al 80 y al 60 por ciento de los aportes, y siguen las evaluaciones. Y cuatro instituciones ofrecieron voluntariamente la disminución del subsidio. Hay faltas a los deberes de funcionario público por acción y por omisión, y acá anteriormente hubo faltas por omisión.

-Durante su campaña, el ahora gobernador electo Jorge Obeid había calificado las medidas del ministerio como "una agresión inexplicable e inoportuna", y había llamado a "dejar tranquila a la educación privada". ¿Cómo sigue entonces este proceso que usted comenzó?

-Los tomé como los dichos de un candidato. Y los candidatos siempre se fugan de la realidad o quieren evitar decisiones conflictivas. Obeid es ingeniero y la racionalidad prima. Es respetuoso de la ley, entonces no creo que no la vaya a respetar. Tampoco creo que haga una interpretación diferente de la norma, hay una sola forma de interpretarla.

-¿Pero podría el nuevo gobierno dar marcha atrás?

- El cumplimiento de la ley es uno, no se puede dar marcha atrás. Si quieren hacerlo, van a tener que cambiar la ley para que diga que a una escuela privada se le puede dar el subsidio que quieran y que tienen derecho a cobrar la cuota que quieran. Además, la gente tiene ahora la información y sabe cómo es la cosa.

Germano defendió la ley.