Apretada a los chinos

Los primeros días del mes de agosto la Administración Estatal para la Supervisión de Calidad, Inspección y Cuarentena de la República Popular China (AQSIQ) comunicó a las autoridades argentinas en ese país que cuatro cargamentos de soja provenientes de Argentina y Brasil de los dos últimos meses presentaban alteraciones en el producto, específicamente trozos de tierra mezclados con la soja. La medida podría afectar a otros 7 cargamentos de soja, por un volumen aproximado de un millón de toneladas, que estarían arribando en el transcurso del mes de agosto y septiembre a puertos chinos. De esta reunión surgió la propuesta de enviar una misión técnica a China en conjunto con Brasil.