Dos oficiales de la comisaría 22ª apresados por Asuntos Internos

Pidieron una coima para "arreglar" un sumario y terminaron detenidos

Dos oficiales están acusados de extorsionar a un conductor que había protagonizado un accidente de tránsito

Dos oficiales de la comisaría 22ª de Pérez fueron detenidos y pasados a disponibilidad por extorsionar a un hombre que había protagonizado un accidente de tránsito, a quien le pidieron dinero a cambio de mejorar su situación procesal. Tras recibir la denuncia del conductor, la Dirección de Asuntos Internos montó un operativo para simular el pago de la coima con billetes marcados y los policías mordieron el anzuelo.

El procedimiento se inició el miércoles 17 de julio luego de que un habitante de Pérez sufriera un accidente de tránsito al chocar contra inspectores municipales de esa ciudad. Al parecer, el hombre intentó eludir un control pese a que "no tenía nada que ocultar" y esto desencadenó el accidente que terminó con heridos leves, según una fuente policial.

El siniestro motivó la intervención de la comisaría 22ª, que tiene jurisdicción en el lugar del accidente e inició las actuaciones por el caso. A raíz del choque el automovilista fue demorado en la seccional y allí fue donde se produjo el incidente que más tarde denunció en la Dirección de Asuntos Internos, dependiente del Ministerio de Gobierno provincial.

El denunciante sostuvo que, al mediodía, dos oficiales de la repartición le exigieron una suma de dinero cuyo monto no fue precisado a cambio de modificar datos en el parte preventivo para favorecerlo en el curso de la investigación judicial.

Pero la víctima de la extorsión no estaba dispuesta a aceptar el arreglo que le ofrecían los uniformados y por la tarde denunció la maniobra. Esto les permitió a los hombres de Asuntos Internos armar un operativo para capturar a los acusados in fraganti. Un alto vocero de esa oficina reveló que los pesquisas marcaron billetes y enviaron a la víctima a cerrar trato con los oficiales. El procedimiento culminó el jueves a la noche con la detención de los dos funcionarios y fue "positivo desde el punto de vista procesal" ya que se logró "el secuestro de elementos que dieron entidad a la denuncia", reveló el vocero.

Los imputados son el comisario Luciano Servidio y el oficial principal Jorge Luis Ramírez. Servidio era el subjefe de la comisaría y entonces estaba a cargo de la dependencia. Ramírez era el responsable del sumario. Con intervención del juzgado de Instrucción Nº 10, a cargo del juez Alfredo Ivaldi Artacho, ambos quedaron detenidos e incomunicados hasta que el magistrado les tomó declaración indagatoria por la extorsión. Dos días después Servidio y Ramírez recuperaron la libertad, aunque siguen imputados en la causa.


En disponibilidad
El vocero consultado destacó que ni el jefe de la seccional ni el inspector de zona VII, Domingo Báez, que tiene su despacho en una habitación contigua a la comisaría, tuvieron relación con la extorsión denunciada. Según se estableció, el titular de la seccional, comisario Néstor Vallejos, había viajado a Buenos Aires para someterse a un tratamiento médico.

Los policías denunciados ahora se encuentran en disponibilidad, a la espera de que se resuelva la causa penal y con un sumario administrativo abierto por el jefe de la Unidad Regional II, Luis Pogliese. A ambos le retiraron el arma reglamentaria y la credencial de policías. Actualmente no prestan servicio.

Tras la detención de los oficiales, los investigadores de Asuntos Internos resolvieron devolverle a la víctima algunos efectos que le habían secuestrado a pesar de que "no correspondía retenerlos". El conductor, por su parte, quedó imputado de lesiones leves culposas ante la jueza Graciela Sedda, del juzgado Correccional Nº 4, aunque luego las víctimas decidieron no instar la acción penal en su contra, según informaron fuentes de la fuerza.