| domingo, 27 de julio de 2003 | El director fue funcionario de la dictadura y hay un jefe procesado por coimas Funcionarios con pasados oscuros dirigen la escuela que capacita a municipales Donde se dictan cursos de perfeccionamiento hay áreas a cargo de gente que alguna vez protagonizó escándalos Diego Veiga / La Capital Increíble pero real. En la Escuela Superior de Administración Municipal, el lugar donde se capacita y perfecciona a los empleados de la Intendencia, hay áreas a cargo de funcionarios con pasados al menos conflictivos. El jefe de Departamento está procesado por pedir coimas, el director de la repartición fue funcionario de la última dictadura militar y en el staff permanente figuran desde un ex juez de Faltas sobre el que sobrevolaron sospechas hasta una empleada de ceremonial a quien se vinculó con la desaparición de una obra de arte.
Todos están allí. Forman parte del personal que compone la Escuela Superior de Administración Municipal y sus ingresos mensuales, al igual que los cargos que ostentan, están publicados en la página web oficial del municipio: www.rosario.gov.ar.
Según este sitio, el director de la escuela es Norberto Martínez Delfa, un hombre con un pasado conflictivo. Formó parte de la última dictadura militar y es duramente cuestionado por los organismos de derechos humanos. En 1981 fue designado director general del Tribunal Municipal de Faltas, cargo al que llegó luego de haber ocupado distintos puestos en el gobierno de facto, como el de integrante del Comisión de Asesoramiento Legislativo de la Junta Militar.
Pero la Escuela Municipal también tiene otros integrantes. Tal es el caso de Julio Occhi, un ex jefe de Espectáculos Públicos que fue procesado por pedir coimas por el juez de Instrucción Carlos Carbone.
Occhi saltó a la fama a comienzos de 2001, cuando algunos bolicheros rosarinos hicieron pública la trama oculta de los pedidos de coimas que debían soportar noche tras noche.
Por aquel entonces, este polémico funcionario estaba al frente de los inspectores municipales y el juez consideró que cumplía un rol "oculto pero al mismo tiempo fundamental" en el pedido de sobornos. Hoy, y mientras espera la sentencia, vuelve a tener a su cargo otra jefatura, la del Departamento de la Escuela Municipal. Eso sí, este diario no pudo confirmar si está encargado de dictar alguna materia de perfeccionamiento.
"Este es el reino del revés. El lugar donde se capacita a los empleados municipales está en manos de funcionarios cuestionados", admitió un hombre de estrecha llegada al intendente Hermes Binner.
Un ámbito de docencia La Escuela Superior de Administración Municipal es un organismo que depende de la Secretaría de Gobierno y al que se considera un "ámbito de docencia". Allí se dictan cursos de perfeccionamiento para los empleados de la Intendencia y según los datos del sitio web oficial cuenta con 14 empleados.
Uno de ellos es Daniel Cosio, un ex juez de Faltas que se alejó del cargo luego de haber sido cuestionado. Según recuerdan los memoriosos, "tuvo que soportar algunas críticas. Se lo empezó a señalar como un juez que supuestamente habría condonado varias multas, lo que alimentó muchas sospechas".
Inmerso en estas acusaciones, Cosio dejó el Tribunal y llegó a la Escuela de perfeccionamiento. Hoy, su despacho está muy cerca de la oficina del inspector procesado por pedir coimas.
En la escuela también trabaja Fanny Gladys Aldana, una mujer que llegó a la Dirección de Ceremonial de la Municipalidad durante el gobierno de Horacio Usandizaga y a la que trasladaron años después en medio de un escándalo.
En 1992, y en el marco de la vista a Rosario de la infanta Cristina para inaugurar el Centro Cultural Parque de España, el por entonces intendente Héctor Cavallero le obsequió un cuadro que se transformó en el eje de una polémica.
Según recordaron las fuentes consultadas, "el cuadro partió hacia España pero aquí no quedó registrada su donación, por lo que todos creyeron que había desaparecido".
Así, la supuesta desaparición de la obra de arte se transformó en un escándalo. "Aldana quedó metida en este lío pero creo que le hicieron una camita, ella no tuvo nada que ver. El cuadro no desapareció, se lo regalaron a la Infanta y no lo asentaron en ningún lado", recordó un hombre que por aquellos años caminaba a diario por los pasillos de la Intendencia. Lo cierto es que la empleada también fue trasladada a la Escuela de Administración Municipal.
"Ahí van a parar todos los que tienen problemas. En su momento se los trasladaba a la Dirección de Defunciones y Cementerios, pero en los últimos años el destino es la Escuela Municipal", confió un informante. enviar nota por e-mail | | |