Kirchner buscará el apoyo de Bush en la negociación con el FMI

Buenos Aires.- El presidente Néstor Kirchner se reunirá el miércoles con su colega de Estados Unidos, George W. Bush, "a agenda abierta", pero con su interés focalizado en obtener respaldo norteamericano en la negociación con el con el FMI.

"Habrá agenda abierta. Cada país tendrá sus puntos prioritarios", dijo este sábado desde Lisboa el canciller argentino, Rafael Bielsa, a una radio de Buenos Aires.

Bielsa opinó, sin embargo, que el diálogo probablemente incluya "el sistema de preferencias (arancelarias) para productos argentinos, el acuerdo con el Alca en el marco del Mercosur, la negociación con el FMI y la participación argentina, en el marco de la ONU, por la paz y reconstrucción de Irak".

La reunión Bush-Kirchner iba a realizarse dentro de algunas semanas, con lo que el argentino no hubiera tenido oportunidad de solicitar en el máximo nivel el apoyo estadounidense en la negociación con el Fondo, que el gobierno latinoamericano desea ver concluida con éxito el 9 de septiembre.

El jefe de Gabinete, Alberto Fernández, dijo hoy que "el adelantamiento del viaje de Kirchner a Estados Unidos se debe al éxito del viaje a Europa y al ser (el encuentro con Bush) con agenda abierta, puede generar un diálogo franco que sea redituable para Argentina".

En tanto, el embajador argentino en Estados Unidos, José Bordón, también cosultado telefónicamente por una radio porteña, admitió desde Washington que las negociaciones con el FMI serán analizadas en la Casa Blanca.

"No espero (que se consideren) temas puntuales, sino un clima global de entendimiento, entre los cuales el tema económico, a 30 días del cierre de las negociaciones con el FMI, obviamente estará presente", dijo Bordón.

El diplomático sostuvo que "el encuentro personal puede generar un clima de confianza que permita profundizar y llevar adelante los temas de consenso: confianza, conocimiento y apertura son los ejes centrales de la agenda".

La inclusión de la cuestión económica parece confirmarla también la decisión del presidente argentino de viajar con el ministro de Economía, Roberto Lavagna, responsable de la negociación con el FMI, en procura de un acuerdo a tres años que incluya una redistribución de los pagos de deuda que se concentran sobre el final de 2003.

Estados Unidos adelantó el jueves pasado una expectativa de rápido entendimiento entre el FMI y Argentina por intermedio del subsecretario del Tesoro para Asuntos Internacionales, John Taylor.

"Creo que existe una buena intención para hacerlo, así que no tengo razones para sospechar de que no puede hacerse", dijo Taylor al salir del Congreso estadounidense, consultado por la prensa sobre si creía que habría acuerdo antes del 9 de septiembre, fecha del vencimiento de unos 2.880 millones de dólares de Argentina con la institución.

Mientas, el secretario de Finanzas, Guillermo Nielsen, inició este sábado una gira por Japón, Estados Unidos y Europa para dialogar con los tenedores privados de bonos argentinos, en mora desde diciembre de 2001.

Nielsen visitará Tokio, Francfort, Roma, Nueva York, sedes de los Grupos Consultivos de asistencia a los acreedores integrados en esas ciudades y que siguen en todo el mundo las demandas de los tenedores de títulos argentinos.

La deuda en mora de Argentina con unos 700.000 tenedores de bonos es de unos 76.000 millones de dólares, proyectada a fines de 2003, mientras que el total del adeudo es de 137.000 millones.

Argentina dejó de pagarle a los acreedores privados en diciembre de 2001, cuando declaró la mayor moratoria de la historia, pero continuó cumpliendo sus obligaciones con los organismos multilaterales, y logró en enero pasado un acuerdo hasta el 31 de agosto con el FMI para postergar pagos al organismo. (AFP)