| sábado, 12 de julio de 2003 | Para Bendini, hay total tranquilidad Inquietud en las Fuerzas Armadas por el pedido de extradición Jefes militares se reunieron con legisladores del PJ para analizar qué pasará si hay luz verde a la solicitud de Garzón Aunque el jefe del Ejército, general Roberto Bendini, afirmó ayer que "hay absoluta tranquilidad" en la fuerza a su cargo por la casi segura derogación del decreto que impide la extradición de militares acusados de delitos de lesa humanidad, altos miembros de las Fuerzas Armadas se reunieron con diputados justicialistas para transmitirles su inquietud por el espinoso tema.
"Ese es un problema del presidente de la Nación y de la Justicia", se excusó de opinar Bendini sobre las medidas que adoptará el Ejecutivo frente a la solicitud del juez español Baltasar Garzón para que sean arrestados y extraditados más 46 militares acusados de haber integrado el aparato represivo de la dictadura.
"El Ejército apunta a trabajar hacia adelante" y "hay absoluta tranquilidad" en la fuerza, afirmó escuetamente el jefe castrense en un intento por mostrar que no existe malestar en la institución ante la posibilidad de que ex represores puedan ser juzgados aquí o en el exterior.
Las afirmaciones de Bendini quedaron en entredicho al trascender que la semana pasada los principales referentes del bloque de diputados del PJ se reunieron, al menos en una oportunidad, con los jefes de las FFAA.
Según dos participantes del encuentro, en una cena celebrada en la Dirección de Remonta y Veterinaria, que el Ejército posee en Capital Federal, los comensales analizaron la posible derogación del decreto, sancionado durante el gobierno de Fernando de la Rúa, que impidió a la Justicia resolver los pedidos de extradición.
Allí ambas partes manifestaron preocupación. Los jefes militares, por las consecuencias de la casi segura derogación; los legisladores, por el poder que acumularían los jueces federales si la decisión final sobre las extradiciones queda en sus manos.
Los legisladores preferirían que el Ejecutivo, si avanzara con la idea de derribar el decreto firmado por Fernando de De la Rúa, lo declarara inconstitucional en vez de nulo. Jurídicamente, la nulidad equivale a que el decreto nunca hubiese existido. En cambio, si se lo considera inconstitucional, los acusados podrían ampararse en el principio de la ley más benigna y reducir las posibilidades de ser extraditados.
Según los voceros -que pidieron el anonimato-, la cena sirvió también para repasar la dinámica adquirida por el juicio por la masacre de Margarita Belén, que se lleva adelante en el Chaco. En principio, las conclusiones surgidas en la reunión interpretaron que la Corte Suprema tendrá en su poder la resolución final de las conflictos cuando se expida sobre la constitucionalidad de las leyes de punto final y obediencia debida.
Más allá del intento de Bendini por mantener cuarteles adentro cualquier manifestación de malestar en su tropa, resulta claro que la embestida por sentar en el banquillo a ex represores genera inquietud entre los militares.
No es casualidad que el pedido de extradición girado por Garzón coincida con la arremetida del nuevo gobierno para "separar la paja del trigo" en la institución militar, como dijo el propio Kirchner durante la cena de camaradería de las FFAA el lunes pasado. enviar nota por e-mail | | Fotos | | Pampuro junto a Bendini, jefe del Ejército. | | |