El congreso realizado en Rosario subrayó la importancia de la organización

Los Crea incentivan la participación

Los productores líderesse mostraron dispuestosa trabajar más fuertetranqueras afuera

Tenemos que participar más para forjar nuestro destino". Con esta frase, Marcos Rodrigué, presidente de la Asociación Argentina de Consorcios Regionales de Experimentación Agrícola (Aacrea), cerró el 22º congreso regional de los grupos Crea del Sur de Santa Fe, que se realizó en Rosario. Bajo el lema, "Argentina, el campo puede", el congreso Crea se centró en la importancia del sector agropecuario para la economía del país y en la necesidad de que los productores participen en los procesos de cambio productivo, social y económico. "Gran parte de lo que nos pasó es culpa nuestra, por dejar que otros hagan lo que nosotros debemos hacer, los insto a que participemos más, mucho más", dijo Rodrigué.

Por su parte, el asesor de Crea de la localidad santafesina de Santa Isabel Enrique Seminario opinó que "tenemos que aflojar con el tango de que todo está mal y entender que un líder no es alguien especial, nosotros podemos ser líderes también y dar un ejemplo social de emprendimiento".

En tanto, el vicegobernador santafesino, Marcelo Muniagurria, dijo que "Argentina está en deuda con los productores en cuanto a infraestructura", pero enfatizó que tienen que ser los mismos productores los que tienen que pelear y conseguir que haya una infraestructura acorde con "el crecimiento que experimenta el campo argentino".

El embajador de Nueva Zelanda en Argentina, Carl Worker, describió la experiencia de un país que se organizó en forma eficiente en base a una definición como economía agroindustrial. El diplomático dijo que los habitantes de Nueva Zelanda "están orgullosos de que su país sea un gran exportador de productos agropecuarios" porque les permite alcanzar un muy buen nivel de vida y tener una fuerte inserción económica internacional. "Todos los ciudadanos neocelandeses respetan la dura labor de sus productores, que son competitivos internacionalmente y desarrollan muchos esfuerzos en la aplicación de tecnología, son capaces, inteligentes y están bien informados", destacó el embajador.

El especialista Teodoro Zorraquín dio los números sobre el aporte del campo a la economía argentina. "El sector agropecuario se encuentra en permanente desarrollo y es responsable de más del 50% de las exportaciones", afirmó y dijo que "el sector agroalimentario se encuentra en permanente desarrollo, en la década del 90 creció al 4,1% anual y en los últimos años muestra un crecimiento sostenido en hectáreas sembradas, en rendimientos y en tecnología aplicada, que dan como resultado un valor bruto de la producción de 46.640 millones de pesos y un gasto en insumos de 17.693 millones de pesos".

El titular de las empresa Los Grobo, Gustavo Grobocopatel, destacó que la importancia de las redes en la producción agropecuaria presente y futura. Las definió como "cooperaciones multidireccionales entre los individuos, grupos o sectores" que permiten concretar una nueva forma de concebir los negocios agroindustriales y las relaciones entre las empresas y las personas.

En su organización, Grobocopatel adoptó esta forma de trabajo, que alcanzó gran escala e incluye más de 100 pymes, entre contratistas, prestadores de servicios y otras empresas. En esta forma de trabajo, los integrantes alcanzan gran especialización, con desplazamientos en los roles tradicionales por otros nuevos, para que toda la red alcance mayor competitividad. La aparición de redes y de grandes operadores también genera perdedores, que son desplazados del sistema y que podrían reciclarse mediante la educación, según el empresario. El orador entendió que "no hay que asustarse por la aparición de empresarios que se funden en el campo, mientras haya otra generación de emprendedores que los reemplacen".

En tanto, Ezequiel Fonseca puso énfasis en el desarrollo de la biotecnología para el sector agroalimentario. "La biotecnología es uno de los cambios más importantes y revolucionarios de la humanidad, va a permitir cambiar cantidad, calidad y costo de los alimentos, lo que permitirá que muchos que muchos más puedan comer", afirmó y enfatizó que "el sector agropecuario no debe perder más tiempo, tiene que participar de la carrera tecnológica".

"¿Podemos competir sin subsidios y sin un marcado desarrollo de biotecnología con países que tienen ambas cosas?, ¿cómo haremos para crear agroindustria competitiva y desarrollo en cultivos de autógamas que cubren más del 80 por ciento del área agrícola del país si no se reconoce la propiedad intelectual?", dijo al finalizar su exposición.

Por su parte, el presidente del congreso, Miguel García Fuentes, propuso a los productores "hablar de comunidad agropecuaria y no de sector". Añadió que "durante años, tal vez durante toda nuestra vida, venimos hablando del sector agropecuario. De esa forma estamos distanciando y, hoy en un mundo donde se habla de cadenas de redes, no es correcto definirse como sector".

García Fuentes destacó un cambio de actitud en el cual se propone crear una "comunidad agropecuaria que quiere incluir directa e indirectamente a todos los argentinos que se vinculan a ella".

"Argentina: el campo puede", dijo con énfasis. "Puede dar trabajo, promover inversiones, disminuir el hambre, generar divisas, el campo puede incluir a todos en este país", añadió ante un cerrado aplauso del auditorio, colmado de productores agropecuarios de distintos puntos del país.

Para Crea los productores deben asumir compromisos