Asalto a la ilusión

Rugby: Los Pumas cayeron ante los Springboks "con atenuantes"

El triunfo de Sudáfrica fue por 26 a 25

La sensación fue de despojo. En la última jugada del encuentro, un penal del apertura Louis Koen impidió que el seleccionado argentino de rugby consiguiera ayer en Port Elizabeth su primer victoria ante su similar de Sudáfrica. Finalmente, los Springboks derrotaron a Los Pumas por 26-25 en un encuentro emotivo, en el cual el conjunto albiceleste sucumbió en el cierre ante el mayor poderío físico de su oponente.

De esta manera, el equipo conducido por Marcelo Loffreda cerró la primera parte de la temporada con dos éxitos ante Francia y una digna caída ante Sudáfrica, que dejan un balance positivo de cara al Mundial de Australia que dará inicio el 10 de octubre.

Los Pumas jugaron un buen partido ante una de las cinco principales potencias del mundo, que contó con todos sus titulares.

Si bien empezaron perdiendo 10-0, producto de un penal del efectivo Koen y un try del hooker Coetzee gestado tras un kick que le taparon a Nicolás Fernández Miranda, pudieron recuperarse y terminaron la primera parte en ventaja por 15-13.

Los primeros veinte minutos Los Pumas mostraron varios puntos oscuros, los más llamativos fueron la falta de orden y el apresuramiento que mostraron para utilizar la pelota.

Después de ese lapso, el protagonismo fue del equipo argentino, que empezó a tener la iniciativa.

De una pelota recuperada se gestó un contragolpe excepcional. Con apoyo y muchos pases la jugada fue culminada por Felipe Contepomi y después con una gran maniobra tramada entre Lucas Ostiglia y Rolando Martin, permitió que el tucumano José María Núñez Piossek le pusiera la cereza al postre y le diera la ventaja parcial a la Argentina, que hasta allí era superior.

Pero en el complemento, en base a su mayor poderío físico, los Springboks monopolizaron la pelota y fueron restándole fuerzas al pack albiceleste. Poco a poco fueron dejándolos sin piernas.

Obligados en parte por el marcador los locales llevaron el juego a terreno argentino, se instalaron pero exhibieron pocas ideas a la hora de superar la sólida defensa argentina. Argentina aguantaba los embates, no desesperaba. Y en el momento indicado Los Pumas pegaron el zarpazo.

A partir de los 15 minutos, la presión del local fue muy intensa, pero tras otra pelota recuperada, surgió un buen movimiento ofensivo gestado por los noveles Núñez Piossek, Patricio Albacete y Juan Martín Hernández, que terminó con el fullback apoyando bajo los palos.

Minutos antes, el árbitro Nigel Williams, de floja labor, le había anulado insólitamente un try a Contepomi (lo que habría cambiado el curso de la historia), ya que entendió que Rimas Alvarez había cometido una infracción en una jugada previa que nada tenía que ver con la maniobra que concluyó con el mellizo en el ingoal.

Faltaba poco y la hazaña estaba cerca. Pero Sudáfrica siguió desgastando con su potencia y, al final, pudo quebrar la meta a través del ingresado Brent Russell.

De esta manera, el local quedó a tiro de un penal, que obtuvo en la última jugada del test match, tras una mala decisión argentina en ataque que posibilitó la contra letal. Koen, como en toda la tarde, no falló y terminó con las ilusiones de Los Pumas.

Martin, clave en la tarea del pack de forwards.