Cansancio Visual

La fatiga visual, las irritaciones producidas por procesos alérgicos y las infecciones generadas por el uso de cosméticos son algunos de los factores que empeoran la salud ocular.

Los ojos son uno de los órganos más sensibles por encontrarse permanentemente expuestos a factores externos. El cansancio visual que supone la lectura intensa o el trabajo prolongado frente a la computadora, la utilización de determinados cosméticos, la contaminación ambiental, el polvo o la falta de higiene de las manos y uñas, que suelen entrar frecuentemente en contacto con los ojos, pueden favorecer el desarrollo de infecciones y trastornos. Para evitar estos problemas y mejorar la salud y la belleza de los ojos sólo es necesario adoptar unas sencillas medidas de prevención.

Higiene diaria

Lavar las manos antes de tocarse los ojos.

Aunque piquen, no frotarlos de manera compulsiva. Es mejor realizar movimientos circulares con los párpados cerrados.

La manzanilla natural posee propiedades beneficiosas para la sequedad ocular y resulta un buen antiinflamatorio. Usarla siempre diluida en agua.

Los productos cosméticos están elaborados a partir de una base grasa que se deshace al entrar en contacto con la piel y el calor ambiente. Esta solución puede introducirse en los ojos produciendo irritación y alergias.

Utilizar productos antialérgicos.

Al perfilar el contorno de los ojos con el lápiz, procurar no tocar el interior.

Demaquillarse todos los días con un producto adecuado.

En el caso de alergias, evitar el polvo, las alfombras, los almohadones de plumas y los juguetes de lana o peluches.

Usar anteojos para sol los días de mucho viento.

No automedicarse sin consultar con un oftalmólogo.

Protección de los párpados

Los párpados proporcionan una envoltura especial a los ojos que los aísla del exterior y facilitan su función. La blefaritis o inflamación de los párpados, produce lagrimeo constante y el uso de pañuelos de papel puede irritar los ojos. Se debe acudir al oftalmólogo ante los primeros síntomas.

La piel de los párpados es delgada y suele tocarse frecuentemente con los dedos. Se debe extremar la higiene sobre todo si se usa esmalte para uñas.

Para el uso de lentes de contacto hay que tener precauciones al introducirlas y extraerlas del ojo, evitar la sequedad ocular, además de cuidar la higiene y el mantenimiento, porque una deficiente conservación puede producir infecciones, algunas de gravedad como la queratitis.

Con algunos cuidados se puede preservar la vista.