Para el ministro de Salud el secretario municipal del área es "inimputable"

Los cruces entre el ministro de Salud de la provincia, Fernando Bondesío, y el secretario municipal del área, Miguel Angel Cappiello, siguen subiendo el tono. El funcionario provincial dijo que el colaborador del intendente Hermes Binner lo tiene "harto" y lo calificó de "inimputable". El enfrentamiento ahora estalló porque el funcionario rosarino reclamó ante las autoridades nacionales leche, dispositivos intrauterinos (DIU) y anticonceptivos.
Bondesío estuvo reunido ayer en Santa Fe con el ministro de Salud de la Nación, Ginés González García, y parte de sus colaboradores. "Hablamos de la visita que hizo Cappiello y pude saber que en Buenos Aires sólo dejó una carpeta con algunos pedidos", dijo a La Capital el funcionario provincial, antes de opinar que el secretario municipal es "inimputable".
El ministro de Reutemann recordó que hace dos meses la provincia envió 7 mil kilos de leche fortificada a Rosario, porque "el municipio no contaba con crédito para conseguirla". Trascartón agregó que en los próximos días enviará 3.500 kilos más y se prevé que se entregarán otros 10 mil kilos de leche común para las madres.
"Cappiello ya me tiene harto", confesó ayer Bondesío en declaraciones a la emisora Radio Dos. Asimismo, afirmó que desde que se hizo cargo de la cartera sanitaria, en Rosario sólo encontró "conflicto".
Luego recalcó que Cappiello "conoce perfectamente cuántos DIU y anticonceptivos se van a entregar para Rosario" y argumentó que el retraso en la distribución y en la implementación de los planes de salud reproductiva que se habían anunciado para mayo pasado se debió a la catástrofe que se vivió en la capital provincial.
"Creo que todas estas cuestiones son usadas políticamente y por eso no se puede establecer un diálogo sin chicanas con la Municipalidad de Rosario", añadió el ministro, tras recordar que tiempo atrás intentó firmar un convenio con Binner pero "él ni apareció por el lugar y sólo envió al secretario del área".
A renglón seguido aseguró que no debatirá estas cosas con Cappiello, y dijo que él no está para "discutir estupideces". Y para terminar indicó que "si los funcionarios de todas las municipalidades del país fueran a reclamar a Buenos Aires lo que les hace falta, volverían locos a los funcionarios nacionales". El ministro afirmó que Cappiello nunca se comunicó con él ni inició los trámites administrativos correspondientes para reclamar leche o anticonceptivos.