El subsecretario de Seguridad en los Espectáculos Futbolísticos, Javier Castrilli, desarrolló ayer una reunión con directivos de San Lorenzo y Huracán en la que se trazó el plan de acción preventiva para el clásico barrial del próximo domingo a las 11. El presidente de Huracán, Marcelo Buenaga, y el vice sanlorencista, Rafael Savino, participaron del encuentro en el que se subrayó la necesidad de desactivar la iniciativa de los hinchas del Ciclón de asistir al estadio vestidos de negro, en señal de luto por el descenso de su tradicional rival. También confirmó Castrilli durante la reunión, que se desarrolló en dependencias del Ministerio de Justicia, Seguridad y Derechos Humanos, que el total de efectivos dispuestos para controlar la seguridad ascenderá a 600. Pero además habrá doce fiscales contravencionales que pueden decidir en el momento la detención de algún asistente que viole reglas establecidas, mientras que tres helicópteros sobrevolarán la zona del estadio del Bajo Flores. Por otra parte, la ciudad deportiva de San Lorenzo permanecerá cerrada el día del partido desde las 8 para evitar filtraciones, y aunque no se podrá marginar a los que asistan con ropa negra, sí se prohibirá el acceso de banderas de ese color. También se instalará en el estadio sanlorencista un centro de orientación y asesoramiento, una prueba piloto que la subsecretaría viene implementando desde el superclásico Boca-River. Castrilli destacó en diálogo con la prensa que "la policía efectuará un esfuerzo considerable para cubrir todos y cada uno de los espacios de la caravana que realizará la gente de Huracán desde Parque de los Patricios hasta la cancha de San Lorenzo". "También impediremos, además de las banderas, que ingresen hinchas con globos negros, e instruimos a los dirigentes para que a su vez ellos les transmitan a los jugadores y cuerpos técnicos la importancia de mantener la cordura desde adentro", destacó.
|  El ex árbitro se reunión con dirigentes de ambos clubes. |  | Ampliar Foto |  |  |
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