Los jubilados protestaron por la huelga en el Pami

Los gremios del Pami continuaron hasta ayer a la medianoche con el paro que habían dispuesto un día antes, por lo que siguió interrumpida la atención en los policlínicos y las diferentes dependencias administrativas del Instituto. Lógicamente, los jubilados se quejaron por la escasa atención que recibieron.
La medida de fuerza obedeció principalmente al nombramiento de Cristóbal Pilafis como titular de la Unidad de Gestión Local (UGL), con injerencia en todo el sur provincial. Pero también se debió a la "necesidad de que se incorpore más personal para el policlínico Pami II", sostuvo Héctor Vázquez, de la Unión Trabajadores del Instituto (UTI), uno de los tres gremios organizadores de la huelga.
Los jubilados concurrieron ayer a realizar trámites, pero muchos no lograron ser atendidos debido a la medida de fuerza. Y a los dirigentes les pareció "lógico" que protestaran. "Hasta ahora vinimos conteniendo la situación", indicó Vázquez.
Los abuelos se encontraron con casi ningún empleado que los pudiera atender en la UGL, cuyo salón principal en planta baja estaba casi desierto. En tanto, en los centros asistenciales propios sólo se asistieron las urgencias.
"Apenas asumió Pilafis fueron incorporadas 15 personas directamente a planta permanente y nosotros seguimos esperando la efectivización de 400, es injusto", reclamó Vázquez.