"Falta de datos, inexistencia de programas de monitoreo, obras inconclusas, carencias de regulaciones, falta de control y planes de contingencia, no son más que el crudo reflejo de políticas del Estado que no priorizan los recursos o lo hacen desde una mirada alejada de las necesidades de la gente". Tal es la conclusión de un trabajo de expertos de la Facultad de Ingeniería y Ciencias Hídricas de la UNL: "La crecida extraordinaria del río Salado: causas naturales y antrópicas que provocaron la inundación de Santa Fe".
Los investigadores señalan que "la crecida del río Salado se originó por intensas precipitaciones sobre su cuenca baja, ocurridas entre los días 22 y 24 de abril", cuando un sistema frontal caliente semiestacionario se ubicó en el centro del Litoral argentino.
El trabajo indica que el pico de la primera onda de crecida se registró en la escala hidrométrica de Santo Tomé el 12 de marzo, con una altura de 5,42 metros. En tanto, los efectos de la segunda onda de crecida se comenzaron a manifestar a partir del 23 de abril (4,76 metros) en la escala de Santo Tomé, alcanzando el pico en esta estación el 30 de abril (6,28 metros). Si los datos de lluvias y niveles se comparan, se puede observar que el tiempo de retardo comprendido desde el final de la lluvia intensa (24 de abril) y la llegada del pico a Santa Fe (30 de abril) fue de seis días.
Fenómeno previsible
"El caudal el 30 de abril en la sección del viaducto ferroviario ubicado entre la autopista Santa Fe-Rosario y el puente carretero Santa Fe-Santo Tomé fue de 3.100 m3/s, correspondiente a una altura de 6,37 metros", indica el trabajo.
El sector oeste, principal afectado, es una zona con riesgo de inundación que ha sido urbanizada, como ocurrió con varias ciudades y pueblos de la región Litoral. Un estudio a comienzos de los 90 para el gobierno de Santa Fe, con subsidio del Consejo Federal de Inversiones, puso de manifiesto esta situación. En dicho estudio se delimitaron áreas inundables en Santa Fe que, en el caso de la crecida hace 100 años, se correspondieron con lo verificado en esta inundación.
El informe dice que "si bien no se contó con un pronóstico a tiempo real, en marzo de 2003 el Sistema de Alerta Hidrológico de la Cuenca del Plata, dependiente del INA, formulaba una alerta temprana que advertía sobre posibles situaciones de riesgo hídrico sobre la cuenca del Salado".
"Las cuantiosas lluvias ocurridas y el avance de la onda de crecida por la cuenca baja eran de conocimiento público, dando lugar a la superación de varias rutas provinciales arriba de Santa Fe, incluyendo el colapso de puentes y el anegamiento de vastas extensiones rurales", se señala.
Según el informe, la incompleta construcción de la defensa oeste, la insuficiente luz en el puente de la autopista Santa Fe-Rosario, cambios en el uso de la tierra e intervenciones a nivel de cuenca y la falta de una serie de medidas no estructurales fueron las principales causas que potenciaron los efectos de la gran crecida.
El nivel pico del río en proximidades del hipódromo fue de 16,80 metros, por lo que la defensa existente no fue superada por las aguas. Sin embargo "en el sector del cierre provisorio del Tramo 2 se produjo el ingreso del agua al área urbana en la madrugada del 28 de abril".
"La defensa oeste y la avenida Mar Argentino por el sur actuaron como barreras, ya que retuvieron el agua dentro del área urbana. Tanto que el agua interna en la zona suroeste alcanzó un nivel 2,50 metros superior al río", explica el informe.
Las brechas que se abrieron el miércoles 30 en la defensa oeste y en Mar Argentino al sur descomprimieron parcialmente la situación al permitir la descarga de caudales desde el interior del área urbana hacia el Salado y hacia el canal de derivación sur.
Otras causas
Según los especialistas, en 1998 la empresa Aufé (concesionaria de la autopista Santa Fe-Rosario) encomendó al INA-CRL un estudio del puente sobre el río Salado. Se recomendó su ampliación en dos variantes de 300 y 400 metros, para disminuir los efectos de erosión y de sobreelevación de los niveles de aguas arriba que provoca su actual diseño.
Dicho puente tiene una luz de 155 metros, lo que representa tan sólo el 8 por ciento del ancho del valle aluvial (2.000 metros) en esa sección. Con la crecida del río, "se originó una sobreelevación del nivel de agua y un efecto de remanso hacia aguas arriba. El efecto del remanso influyó en el desborde en la zona del hipódromo, a unos 2.400 metros aguas arriba del puente", detalla el informe.
"La concreción de esta ampliación del puente, sumada al cierre de la defensa oeste, hubieran disminuido sensiblemente el riesgo de inundación de las áreas urbanas protegidas por dicha defensa", indica el escrito.