Año CXXXVI
 Nº 49.860
Rosario,
lunes  02 de
junio de 2003
Min 14º
Máx 19º
 
La Ciudad
La Región
Política
Economía
Opinión
El País
Sociedad
El Mundo
Policiales
Escenario
Ovación
Suplementos
Servicios
Archivo
La Empresa
Portada


Desarrollado por Soluciones Punto Com





Fatal accidente en la ruta 14, entre Pueblo Muñoz y Arminda
Seis muertos en un choque frontal originado por una falla mecánica
Las víctimas eran de Villa G. Gálvez. Iban en una pickup que perdió una cubierta y se metió debajo de un camión

Paola Irurtia / La Capital

El camionero sintió una explosión a la altura de su acoplado y buscó en el espejo retrovisor. Lo que alcanzó a ver lo estremeció y lo convirtió en testigo de una tragedia. La camioneta Saveiro que había cruzado unos 200 metros antes, en sentido contrario, había chocado de frente con un camión que venía detrás al desplazarse de su carril por el desprendimiento de uno de los neumáticos. Las personas que iban en la parte trasera de la camioneta fueron despedidas, al igual que el chofer del camión, que quedó tendido sobre la ruta donde por milagro no circulaban más que ellos. El conductor de la Saveiro y su acompañante quedaron atrapados en la cabina del vehículo, que se destruyó con el impacto. Los seis hombres que viajaban en la pickup Volkswagen perdieron la vida en el acto y el conductor del camión fue derivado al hospital Centenario, donde quedó internado.
El accidente ocurrió ayer al mediodía en la ruta 14, a la altura del kilómetro 38, entre Arminda y Pueblo Muñoz. Los hombres que iban en la Saveiro volvían de cazar. El conductor y el acompañante iban sujetos con el cinturón de seguridad y sus cuatro compañeros en la parte trasera del vehículo, que llevaba cúpula. El camión contra el que se estrellaron es un Mercedes Benz 1114 que había partido de Lincoln, en la provincia de Buenos Aires, e iba a cargar cereal a Las Piedritas. Formaba parte de un convoy perteneciente a la firma Transportes Don Angel que debió hacer un alto en el camino por el accidente.
El Mercedes Benz quedó clavado en la banquina, con la trompa hacia el lado opuesto al que circulaba, completamente dado vuelta por el violento golpe. El chasis estaba totalmente desplazado hacia el costado derecho y un compartimento ubicado entre la cabina y el chasis quedó con su pared delantera unida a la trasera en la parte superior, formado una "z".
"Las personas que iban en la cúpula de la Saveiro volaron sobre el camión, o rodaron por el suelo", contó Abel Díaz, el camionero de 47 años que fue testigo del accidente. El conductor es compañero del chofer del camión que protagonizó el choque, Héctor Omar Esnaola, de 39 años, ambos oriundos de Lincoln.

Una frenada en vano
El "Vasco" Esnaola clavó los frenos, que dejaron una estela en la ruta, en un intento por maniobrar e impedir el choque con la camioneta que ya tenía debajo de la cabina. El chofer fue despedido de su asiento y quedó tendido sobre el asfalto. Díaz se acercó y comprobó que su compañero estaba con vida, aunque no podía contestarle. "Justo en ese momento no pasaba nadie más por la ruta", dijo el hombre, que corrió a su compañero hasta la banquina. Después fue a buscar a los que viajaban en la camioneta. "Ninguno estaba con vida, murieron en el acto", contó el chofer conmocionado. Díaz aseguró que la camioneta "se partió en dos y se desintegró" y las fotos que acompañan esta nota así lo reflejan.
"La cúpula desapareció, se perdió", indicaban los policías que luego de tres horas habían hallado el neumático despedido por la camioneta unos 200 metros adentro de uno de los campos linderos a la ruta. Los viajeros volvían de cazar, con una cantidad de mulitas, perdices, patos y armados que quedaron desparramados en la banquina.
Los cuerpos de las seis víctimas fueron trasladados al Instituto Médico Legal de Rosario para su reconocimiento y autopsia. Anoche aún no habían sido oficialmente reconocidos, aunque trascendió que cuatro de ellos serían el policía retirado Armando Roberto Martínez y su hijo Armando Martínez, René Ortiz y Pedro Delgado Díaz, todos domiciliados en Villa Gobernador Gálvez.
"Llevaban ropa deportiva y poca documentación", explicó el subjefe de la Unidad Regional II, Luis Selak, que se traslado hasta el lugar del accidente junto al inspector de zona Domingo Báez y otras autoridades que acompañaron a los efectivos de la subcomisaría 16ª, de Pueblo Muñoz.
Díaz, el testigo del accidente, aseguró que presenció al menos otros cinco choques con varias víctimas fatales. "Cuando afecta a otra gente sabés qué hacer, como ayudar. Nunca me había tocado atender a un compañero. Me quedé shockeado. Ni siquiera me di cuenta de ir a buscar el celular que había dejado en el camión", contó.
Díaz estuvo unos cinco minutos en el lugar del accidente, hasta que se detuvo un conductor a auxiliarlo, que lo ayudó a salir del shock y le prestó su celular para avisar a la policía.
Esnaola, en tanto, recibió asistencia después de tres cuartos de hora y fue trasladado al Hospital Centenario, donde anoche informaron que se encontraba internado en observación, fuera de peligro, indicaron fuentes policiales.
Las actuaciones por el accidente fueron derivadas al Juzgado Correccional Nº5 de Rosario.



El camión no pudo evitar el choque y quedó destruido. (Foto: Alfredo Celoria)
Ampliar Foto
Diario La Capital todos los derechos reservados