Esta semana, el gobierno difundirá dos indicadores para respaldar sus argumentos a favor de la recuperación de la economía. La Administración Federal de Ingresos Públicos (Afip) informará hoy que la recaudación de mayo ascenderá casi a 7 mil millones de pesos, lo que implicaría una suba del 40% respecto del mismo mes del año 2002. En tanto, el miércoles próximo podría conocerse, por primera vez desde la devaluación, un índice de precios al consumidor deflacionario.
Sin embargo, a estas proyecciones concurren factores que condicionan el optimismo oficial. Por el lado de la recaudación, los vencimientos de los impuestos a las ganancias y bienes personales, agigantados por la imposibilidad de que las empresas ajusten sus balances por inflación, dieron un impulso extra a los ingresos del mes pasado.
Según cálculos privados, esta prohibición fue la responsable de que al fisco entraran 2.300 millones de pesos adicionales.
El otro punto que fogoneará la recaudación impositiva es el de las retenciones a las exportaciones. En abril este impuesto aportó más de 800 millones de pesos, cifra que sería superada en los números finales de mayo.
Otro tributo que también apuntala el ingreso fiscal es el impuesto al cheque, cuya recaudación en el mes de mayo llegaría a los 500 millones de pesos.
El jueves pasado, el ministro de Economía, Roberto Lavagna, dijo durante una conferencia de prensa que la recaudación podría situarse n torno a los 6.700 millones de pesos. Sin embargo, tanto en el Palacio de Hacienda como en la Afip distintas fuentes confiaron que la presunción hecha por el ministro fue "muy prudente".
Este nivel de recaudación, garantiza el cumplimiento de las metas de superávit fiscal que el gobierno se había comprometido a alcanzar con el Fondo Monetario Internacional (FMI). Durante el primer semestre de 2003 la Argentina debía conseguir un superávit fiscal primario (sin el pago de intereses de la deuda) de 4.500 millones de pesos.
En el primer trimestre se sobrecumplió la pauta de 1.500 millones de pesos en 288 millones y de acuerdo a los ingresos de mayo, sólo restaría conseguir un saldo positivo de 500 millones durante junio para alcanzar las metas.
El administrador federal de Ingresos Públicos, Alberto Abad, anticipó el viernes pasado que la cifra de recaudación será "tan importante que permitió que el ministro Lavagna tomara dos decisiones trascendentes: devolverles a los exportadores, sobre todo a los pequeños, más de 150 millones de pesos en concepto de reintegro del IVA y adelantar el pago a jubilados".
Deflación
Por el lado de los precios, fuentes oficiales anticiparon que el miércoles el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) informará que en mayo se produjo deflación en los valores minoristas, del orden del 0,2%. Según indicaron, la baja fue inducida por el retroceso de los valores de los alimentos y la estabilidad de las tarifas de los servicios públicos.
Las grandes ofertas en los hipermercados, con bajas de hasta un 20% por compras con tarjeta u otros medios de pago, volvieron a alentar la baja del costo de vida que en abril había registrado una suba de sólo el 0,1%.
Con estas ofertas, las grandes cadenas lograron reducir la pérdida de ventas que alcanzaba al 32% a comienzos de año y que para abril rondaba el 15%. También ayudó a esta baja la tendencia declinante de los precios mayoristas, que en mayo habrían registrado una deflación por tercer mes consecutivo.
Este descenso está avalado por la estabilidad del dólar, del valor internacional del barril de petróleo crudo luego de los picos que se dieron durante la guerra en Irak, y la baja de algunos productos primarios.
El ministro de Economía, Roberto Lavagna, anticipó que los precios al consumidor y mayoristas "comenzarán a converger" luego de la gran escalada que registraron estos últimos el año pasado.
Además, el titular del Palacio de Hacienda destacó que la inflación para todo el año será "menor a un dígito".
Algunos analistas privados consideran inconveniente esta baja y se preguntan si no obedece a cierta desaceleración de la actividad económica. En ese sentido, la Coordinadora de Actividades Mercantiles (Came), advirtió que las ventas en los comercios minoristas registraron una leve desaceleración en mayo.