El gobierno "no va a poner ningún palo en la rueda" para impedir que prospere el juicio político a los jueces de la Corte Suprema, dijo ayer el ministro de Justicia, Gustavo Beliz, quien sostuvo que la administración de Néstor Kirchner propiciará "la depuración del Poder Judicial".
"No vamos a poner ningún palo en la rueda, ningún obstáculo para que se pueda generar la depuración del Poder Judicial desde el máximo nivel si es que los legisladores" avanzan en el proceso parlamentario a los jueces supremos, expresó Beliz.
También prometió que el gobierno "va a ser respetuoso" de las decisiones que adopten los legisladores respecto del desempeño de la Corte, que el año pasado afrontó nueve meses de investigaciones parlamentarias que quedaron archivadas cuando el plenario de la Cámara de Diputados rechazó la acusación contra los ministros presentada por la comisión de Juicio Político.
En las últimas horas, la comisión, que ahora preside el diputado por Tucumán (PJ) Ricardo Falú, decidió convocar a juristas para analizar si reanuda la investigación al presidente de la Corte, Julio Nazareno, quien podría ser sometido a juicio político por mal desempeño de su cargo.
La Corte, en tanto, celebrará el lunes 2 de junio su próxima reunión de acuerdo, dijeron voceros tribunalicios.
La remoción de los jueces de la Corte fue uno de los reclamos que más se escucharon en el recalentado verano del 2001, cuando la sociedad salió a las calles armada de cacerolas y que precipitó las caídas de los gobiernos de Fernando de la Rúa y del peronista Aldolfo Rodríguez Saá.
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La Ciudad
