Pedro Squillaci / La Capital
*** Protagonistas: Julieta Ortega, Florencia Peña, Dolores Fonzi, Belén Blanco y Mirta Busnelli. Dirección: Israel Adrián Caetano. Producción: Ideas del Sur. Emisión: Telefé, Jueves a las 23. Un unitario sobre prostitutas interpretado por reconocidas y bellas actrices es un plato atractivo para degustar. Y si el director que está detrás de cámaras es Israel Adrián Caetano la oferta es más tentadora. El sexo vende y los realizadores alternativos van ganando espacio -afortunadamente- en la pantalla chica. Lo interesante es que en los dos primeros capítulos de "Disputas" (Telefé, jueves a las 23) el oscuro mundo de las mujeres que trabajan por dinero no se tribializó en ningún momento. Sin tener la fuerza de "Tumberos"-el trabajo anterior de Caetano- el ciclo va creciendo a través de historias crudas y verosímiles. La producción es cuidada y los personajes de Mirta Busnelli, Dolores Fonzi, Julieta Ortega, Florencia Peña y Belén Blanco van encontrando de a poco su lugar. El tiempo dirá si estas historias toman vuelo o quedan en la cama. El primer capítulo fue algo menos de lo que se esperaba. La idea era hacer una presentación de Gloria (Ortega), Majo (Peña), Gala (Fonzi), Soledad (Blanco) y Amelia (Busnelli, la madama), pero el formato se hizo reiterativo y poco atractivo. Como un guiño al pasado, Caetano eligió llamar "Okupas" al capítulo debut para pintar la marginalidad de los personajes y también para evocar el ciclo que le dio prestigio a Ideas del Sur en la televisión. Para desandar sus historias, ellas relataron frente a un policía cómo llegaron al oficio más viejo del mundo. La idea del oficial enfocándolas con la lámpara y con su rostro entre sombras remitió a los clásicos policiales en blanco y negro. Gloria tiene un hijo y una pareja densa (Diego Alonso) y hace su trabajo como una profesional. Lo mismo Gala, quien es fría y misteriosa, y lleva el karma de ser hija de una madre prostituta. Soledad es empleada de un minimercado y puede pasar de ser una chica asexuada a una mujer fatal. Majo es una de las sorpresas del unitario. Inocente, ella cae por error en este trabajo y elige quedarse para mantener a su familia, mientras a su marido Gaspar (Damián Dreizik, impecable) solo le interesa que no le corten el cable. La densidad de las vidas comienza a despuntarse de a poco. Gloria soporta que el padre de su hijo la denigre, Gala muestra la tristeza por desconocer a su padre, Soledad está cada vez más en la lona y Majo quiere hablar antes de tener una relación con sus amantes. Aunque este capítulo se llamó "Cuatro amigas" (otro guiño a la productora de Marcelo Tinelli) todavía no se muestra una sólida amistad entre las jóvenes. Quizá la marginalidad, el desamor y los costados dramáticos de sus vidas asuman con el correr de los envíos el verdadero protagonismo del ciclo.
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