Tiende a ser una novela con muchos capítulos. Con mucho suspenso, por sobre todas las cosas. O por lo menos esa es la primera sensación después de lo vivido ayer en la cocina del Consejo Federal acerca de la resolución que tomará el ente que nuclea al campeonato Federal con respecto a los graves incidentes que se registraron el domingo en Mendoza, cuando Matías Roby, médico de Luján de Cuyo, que estaba jugando ante Tiro Federal por la primera final del Apertura, ingresó al campo de juego y agredió física y verbalmente al juez asistente Luis Alfonso y al cuarto árbitro Enrique Domench. Anoche, después de varias horas de espera, se confirmó que las definiciones no estarán hasta dentro de 15 días.
La reunión fue a puertas cerradas. Y, por lo que comentaron desde Buenos Aires, fue bastante áspera. A tal punto que las opiniones están muy divididas. Lo único certero hasta el momento es que este fin de semana no habrá fútbol.
"Como las resoluciones no estarán hasta dentro de 15 días, la segunda final se jugará como mínimo dentro de dos o tres semanas", manifestó el informante desde el Consejo Federal.
Lo que sucede es que habrá que esperar hasta que las partes involucradas (Luján y Tiro) realicen sus respectivos descargos. El plazo que tienen para expresarse es de 72 horas, es decir hasta el jueves. Y una vez que se expidan, después el Consejo Federal reverá el tema y recién ahí se comenzará a vislumbrar cuáles serán los pasos a seguir.
Si bien el tema es muy delicado, no se descarta que se jueguen los 60' que restan, que según dijo una fuente "es la posición más firme hoy en día".
Por otra parte, el Consejo Federal ayer recibió el informe del árbitro Gustavo Müller vía fax. Y, según se supo, fue muy severo con el médico agresor Matías Roby.
El antecedente inmediato en un caso de similares características data de la final de Primera B que en 2001 jugaron Temperley y Defensores de Belgrano en cancha de los celestes, cuando en los vestuarios fue agredido el jugador visitante Hugo Rodríguez.
En esa ocasión, el árbitro Pablo Lunatti decidió la suspensión del enfrentamiento y el Consejo les dio por perdido el partido a los celestes por 1 a 0 y posteriormente Defe logró el ascenso a la B Nacional. Pero ahora habrá que ver si este y muchos otros antecedentes se ponen de manifiesto para tomar una resolución en contra de los mendocinos.
En tanto la posición de los directivos tirolenses consiste en esperar la decisión del Consejo Federal, sin ejercer ningún tipo de presión.
Aunque más allá de buena predisposición que exhiban los dirigentes, cuerpo técnico y jugadores de barrio Ludueña, lo cierto es que les corresponde.
Es que así lo indica el reglamento en uno de sus puntos. Tanto que ante un caso similar al que envuelve a Luján de Cuyo y Tiro Federal, el fallo fue darle por perdido el partido al equipo del agresor.
Igualmente, la determinación final se conocerá recién dentro de dos semanas.
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La Ciudad
